Iñaki Gabilondo es una de las grandes figuras de la radio española. Y durante un corto espacio de tiempo tuve la oportunidad de trabajar a su lado cuando le nombraron Director de los Servicios Informativos de Televisión Española. Su mandato no duró mucho por razones de cambios en la cúpula de Televisión que serían muy difíciles de explicar. Pero en ese tiempo tuvo que enfrentarse con el asalto a las Cortes de unos Guardias Civiles al mando del Teniente Coronel Tejero.
Yo me perdí el 23 F a causa del tenis. Ocurrió que los ganadores del Trofeo Marlboro para periodistas, en la categoría absoluta (La mía) y la de veteranos (José Nake) estábamos invitados a presenciar la final del Trofeo Marlboro para profesionales, que se iba a celebrar en Puerto Rico, en compañía de nuestras respectivas esposas.
Pedí unos días de permiso, y antes de emprender viaje pude informar del intento de Leopoldo Calvo Sotelo de ser elegido Presidente del Gobierno, que resultó en esta primera votación fallido, por no alcanzar los votos necesarios. Me fui a Puerto Rico, vía Nueva York, presencié la final y, a la vuelta a Nueva York, donde me preparaba a pasar unos días antes del regreso a España, el maletero del hotel me dijo estas fatídicas palabras “Balasera en el Congreso”- Llamé al corresponsal en Nueva York, que me informó de lo sucedido y pasé la noche en vela para coger el primer vuelo a Madrid. Llegué a tiempo de informar de la reapertura del Congreso, por lo que la gente creyó que no me había salido de Madrid-
Recuerdo que, llegué a los estudios de Prado del Rey, y entré en el despacho de Gabilondo. No olvidé sus palabras “ Llegaron unos militares, y me pidieron que pusiera música militar, y como yo no sabía si venían por unas horas, o por cuarenta años, accedí a su petición”.
Tras su marcha de TVE no tuve oportunidad de ver a Iñaki, hasta que fue designado por la Asociación de la Prensa como “maestro de periodistas” entre los diez primeros, y yo tuve el honor de figurar en el tercer grupo, dos años después.
Todo esto viene a cuento de que acabo de leer unas declaraciones de Iñaki, en las que comentaba que muchas personas que vivieron la transición quisieran que el futuro fuera como aquel pasado. quisieran que el futuro fuera como aquel pasado. Yo no creo que cualquier pasado sea mejor que el presente y el futuro, pero sí defiendo que los políticos de la Constitución eran, salvo excepciones, mejores y más preparados que los actuales, y supieron renunciar a algunos de sus principios en favor de una concordia que permitiera que el país creciera por los caminos del progreso y de una sociedad más justa y más libre. Y mucho me temo que volvamos a las andadas, es decir, al enfrentamiento y la carga de odio que amenaza nuestra convivencia. Y aprovecho para dedicar un recuerdo de admiración y afecto a ese gran profesional que es Iñaki Gabilondo.
