La crema Regestimul de aloe vera y rosa mosqueta de Atlantia es uno de esos productos que debería considerarse imprescindible para quienes se preocupan seriamente del cuidado de su piel en infinidad de situaciones y circunstancias.
Contiene aceite 100% puro de Rosa Mosqueta, de primera prensada, y aloe vera puro estabilizado también en frío. La sinergia entre estos principios activos y su alta capacidad regeneradora ayudan a mejorar el tono y la textura epidérmicos.
Incluye además en su formulación manteca de karité, con propiedades emolientes e hidratantes; y aceite de aguacate, un eficaz antioxidante rico en ácidos grasos de acción nutritiva y vitamina E, que protege contra el daño provocado por los radicales libres.
Según Andrés Chico, farmacéutico de Atlantia, el aloe vera ofrece propiedades cicatrizantes y de regeneración celular. Su uso más conocido es el de tratar quemaduras, por sus acciones calmantes y regeneradoras cutáneas, pero también es eficaz para mejorar el acné o el enrojecimiento e inflamación epidérmicos.
¿Qué decir respecto a sus capacidades hidratantes, regeneradoras y nutritivas?
El Aloe vera está compuesto por una gran cantidad de polisacáridos, vitaminas, minerales y aminoácidos, entre otros componentes. Se ha demostrado su eficacia reparadora sobre los tejidos. Concretamente su jugo aumenta el entrelazado de las fibras de colágeno, contribuyendo a la regeneración de la piel. Es conveniente utilizarlo ya que las células siempre se están renovando, y gracias a su acción se potencia el proceso de renovación.
¿Para qué tipos de cicatrices resulta eficaz?
Reduce la pigmentación, suaviza la textura de la piel y minimiza la apariencia de cicatrices hipertróficas o queloides. Por eso la utilización regular de la crema Regestimul (de venta en farmacias) en cicatrices ya formadas, puede ayudar a mejorar su apariencia.
¿Siempre en cicatrices ya formadas?
Si, hay que asegurarse que la cicatriz está completamente cerrada y no presenta heridas abiertas. Una vez limpia la zona se aplica una capa del producto con un ligero masaje. Se repite el proceso dos veces al día, preferiblemente por la mañana y por la noche, para obtener mejores resultados.
