España ha dado este domingo un paso decisivo en la modernización del control de sus fronteras al poner en marcha, en fase de pruebas, el nuevo Sistema de Entrada/Salida (Entry-Exit System, EES) en el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas. Este sistema biométrico y automatizado sustituirá al tradicional sellado manual del pasaporte en los países del Espacio Schengen y permitirá registrar con mayor precisión los movimientos de los ciudadanos no europeos.
Un sistema que transforma el control fronterizo
El nuevo EES recopila datos biométricos de los viajeros no comunitarios, incluyendo fotografías y huellas dactilares (excepto el pulgar), además de registrar la fecha y lugar de entrada o salida del país. Supervisado por la Policía Nacional, el sistema busca mejorar la eficacia en la lucha contra la inmigración irregular y otros delitos transfronterizos.
El inspector jefe de la Unidad Central de Fronteras, Juan Manuel Valle, subrayó que con este avance “seremos más eficaces en la lucha contra la inmigración irregular y otros delitos”.
Fin del sellado manual del pasaporte
El Ministerio del Interior explicó que el objetivo del EES es modernizar la gestión fronteriza y hacer los viajes “más seguros, fluidos y eficientes”. Con su implementación definitiva, prevista para el 10 de abril de 2026, el sistema eliminará el sellado manual del pasaporte y lo reemplazará por un control automatizado y común para toda la UE.
Además, el EES permitirá a las autoridades europeas acceder en tiempo real a los datos de cada viajero, así como a posibles incidencias o rechazos en frontera. Los datos se almacenarán en una base de datos común supervisada por las instituciones europeas, garantizando la protección de los derechos fundamentales y la privacidad de los usuarios.
Inversión millonaria y despliegue gradual
España ha invertido 83 millones de euros en la implementación del sistema, cuya puesta en marcha se realizará de forma gradual durante los próximos seis meses.
La primera fase se desarrolla en los aeropuertos internacionales, como Barajas; la segunda, en las fronteras terrestres; y la tercera, en los puertos marítimos.
El Ministerio del Interior recordó que la Policía Nacional conservará la competencia exclusiva sobre la gestión del EES en todos los puntos fronterizos, mientras que la Guardia Civil mantendrá las funciones de resguardo fiscal.
Tecnología para reforzar la seguridad europea
El Sistema de Entrada/Salida fue impulsado por la Comisión Europea en 2016 y aprobado en julio de 2017 tras un acuerdo con el Parlamento Europeo y el Consejo. Entró en vigor oficialmente el 29 de diciembre de 2017, con el objetivo de reforzar la seguridad del Espacio Schengen y detectar estancias irregulares o documentos falsificados.
Los viajeros de países no pertenecientes a la UE serán registrados cada vez que crucen una frontera exterior de los 29 países del Espacio Schengen, con un límite máximo de 90 días de estancia dentro de un periodo de 180 días.
En los casos en que el viajero requiera visado, se almacenarán únicamente los datos del pasaporte y la imagen facial, ya que las huellas dactilares ya estarán registradas durante la solicitud del visado.
Una herramienta contra la inmigración irregular
El nuevo sistema ayudará a detectar entradas fraudulentas, estancias prolongadas y el uso de identidades falsas, problemas que las autoridades europeas llevan años intentando controlar.
Según la Policía Nacional, el EES permitirá “un seguimiento más preciso y rápido de quienes intentan entrar o permanecer ilegalmente en la UE”, fortaleciendo la cooperación entre países.
Una frontera más segura y tecnológica
Con esta iniciativa, España se sitúa entre los primeros países europeos en activar el nuevo modelo de control inteligente de fronteras. El Ministerio del Interior ha asegurado que la transición se realizará respetando plenamente los derechos de los viajeros y que se busca reducir los tiempos de espera en los controles, manteniendo la seguridad como prioridad.
La entrada en funcionamiento del EES marca el inicio de una nueva era en la movilidad internacional, en la que la tecnología biométrica sustituye a los procesos manuales y refuerza la seguridad de las fronteras europeas.