El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid ha autorizado una inversión de 22,1 millones de euros para el nuevo Acuerdo Marco de atención supervisada en pisos y pensiones destinado a personas con enfermedad mental grave y duradera sin apoyo familiar ni de su entorno.
Este contrato permitirá financiar 325 plazas públicas durante los próximos cuatro años, hasta 2030, con un aumento de casi el 22 % en los pisos y de casi el 55 % en las pensiones, garantizando alojamientos estables y de mayor calidad para este colectivo especialmente vulnerable.
Mejora de la calidad asistencial y de las condiciones laborales
El nuevo marco incorpora un sistema de gestión de calidad, la actualización de protocolos y registros de atención, así como los incrementos y complementos salariales derivados del nuevo convenio de discapacidad, reforzando la profesionalización y estabilidad de los equipos.
Dos modelos de alojamiento supervisado
Las plazas se distribuyen por toda la región en dos recursos diferenciados:
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Pisos supervisados, donde conviven varias personas con patología crónica y un nivel suficiente de autonomía, con seguimiento de psicólogos y educadores sociales.
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Pensiones supervisadas, dirigidas a personas con mayor autonomía pero sin recursos económicos, que reciben apoyo en necesidades básicas por parte de trabajadores y educadores sociales.
Una red pública en expansión
Actualmente, la Comunidad de Madrid cuenta con 7.181 plazas públicas, 93 más que el año pasado, distribuidas en 233 centros especializados de la Red de Atención Social a Personas con Enfermedad Mental Grave y Duradera.
Además, 38 equipos de Apoyo Social Comunitario prestan atención psicológica y social en el propio domicilio de los usuarios, en coordinación con los profesionales de Salud Mental del Servicio Madrileño de Salud, reforzando el modelo de atención integral.
