El Pleno del Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón ha aprobado por unanimidad dedicar el centro cultural de Padre Vallet a Esperanza Morón, quien fuera cronista oficial de la villa y una de las figuras más relevantes en la preservación de la memoria histórica local.
La iniciativa, presentada por el Grupo Municipal Popular, se anunció a finales de noviembre tras el fallecimiento de esta destacada vecina y ha contado con el respaldo de todos los grupos municipales, lo que evidencia el amplio consenso institucional sobre su legado.
Un homenaje a la memoria colectiva de Pozuelo
Durante el debate plenario, el portavoz y coordinador de Gobierno, Félix Alba, puso en valor la figura de Morón recordando que “no se puede amar lo que no se conoce” y que dedicó su vida a hacer accesible tanto la historia como la intrahistoria del municipio.
“Se embarcó en la tarea de hacer de nuestro pasado, presente, preservando nuestra memoria colectiva como municipio”, subrayó Alba, quien destacó su entrega total para que los vecinos de Pozuelo no perdieran sus raíces.
Impulso a la sala de documentación de la Biblioteca Miguel de Cervantes
Junto a la denominación del centro cultural, el acuerdo plenario contempla también el refuerzo de la sala de documentación de la Biblioteca Miguel de Cervantes, que lleva el nombre de Esperanza Morón. Este espacio se potenciará como lugar de encuentro y consulta para todos aquellos interesados en conocer más sobre la historia de Pozuelo de Alarcón.
El objetivo municipal es que este fondo documental se consolide como referencia para investigadores, estudiantes y vecinos, manteniendo vivo el trabajo que la cronista desarrolló durante décadas.
Una deuda de gratitud con una vecina universal
Félix Alba recordó que Pozuelo “tiene y tendrá siempre una deuda de gratitud con Esperanza Morón, pozuelera de cuna y universal de vocación”, una mujer que recorrió el mundo pero mantuvo siempre su compromiso con su municipio y sus gentes.
El homenaje simboliza el reconocimiento institucional a una figura clave en la conservación del patrimonio histórico local y refuerza el vínculo entre cultura, memoria y ciudadanía.