En una ciudad como Madrid, donde conviven la gran distribución, el turismo masivo y la vida de barrio, hay gestos que marcan la diferencia. Uno de ellos es la campaña que ha emprendido el concejal del distrito Centro, Carlos Segura Gutiérrez, para visibilizar y respaldar al pequeño comercio madrileño. A través de una serie de vídeos publicados en su cuenta personal de Instagram, Segura recorre distintos establecimientos del distrito, consume en ellos y conversa con los comerciantes, transmitiendo un mensaje claro: el comercio local es esencial y merece apoyo real.
Desde un desayuno en una cafetería tradicional de Malasaña hasta una visita a una librería independiente o una tienda de moda sostenible, los vídeos —de formato ágil, tono cercano y estética espontánea— muestran al concejal interactuando con vecinos y comerciantes en su entorno cotidiano. La campaña busca reforzar el valor del consumo de proximidad y poner en el centro a quienes mantienen viva la economía de barrio.
“Es fundamental defender nuestro comercio de siempre. Son negocios que dan vida a nuestras calles, generan empleo y crean comunidad”, señala Segura en uno de los vídeos. La iniciativa ha sido bien recibida por comerciantes y vecinos del distrito, muchos de los cuales han compartido los contenidos y agradecido el gesto de respaldo institucional.
Un modelo de comunicación política directo y útil
Lejos de los actos protocolarios, esta acción se basa en una estrategia de comunicación directa: el concejal sale al barrio, compra, consume y comparte. Lo hace desde su perfil personal, sin filtros institucionales, buscando conectar con la ciudadanía desde la cercanía y la presencia real.
Los vídeos publicados recogen momentos naturales, sin escenografía ni guion, y refuerzan la importancia de apoyar al comercio de barrio no solo como opción de consumo, sino como pilar de la identidad urbana. En cada establecimiento se reconoce el valor de lo cotidiano: la conversación con la tendera, la recomendación del librero, el trato personal del hostelero de siempre.
Un ejemplo replicable en otros distritos
El distrito Centro de Madrid alberga una altísima densidad de pequeños negocios, muchos de ellos históricos o familiares, que forman parte del paisaje cultural y social de la ciudad. Protegerlos es clave para preservar la diversidad, el empleo local y la vida vecinal frente a la uniformización del consumo.
La campaña impulsada por Carlos Segura es un ejemplo claro de política útil y replicable: sencilla en su ejecución, pero eficaz en su impacto. Muestra que una institución cercana, que escucha y se implica, puede generar valor sin necesidad de grandes despliegues, simplemente dando visibilidad a quienes lo merecen.