Movistar Estudiantes cerró la liga regular de Primera FEB con una derrota por 100-88 ante el Silbö San Pablo Burgos, líder y ya ascendido a la Liga ACB. El conjunto colegial, que se jugaba su posición final entre el segundo y el cuarto puesto, no pudo frenar el poder ofensivo del conjunto burgalés en el Coliseum de Burgos, en un choque que comenzó con muchos problemas para los de Pedro Rivero y en el que las bajas y la irregularidad defensiva terminaron por pasar factura.
El inicio del partido fue claramente para los locales, que supieron aprovechar el desacierto ofensivo de los estudiantiles para abrir la primera brecha (16-7). Pese a los intentos de Movistar Estudiantes por recortar distancias, las faltas personales y los problemas defensivos permitieron a Burgos cerrar el primer cuarto con ventaja (29-20).
El segundo cuarto fue aún más complicado para los visitantes. Sola y Schmidt fueron los únicos que sostuvieron al equipo en ataque, pero el dominio local se amplió hasta alcanzar una máxima diferencia de 19 puntos (54-35). Al descanso, la renta burgalesa parecía encarrilar el partido (54-38).
Sin embargo, el Estudiantes reaccionó tras el paso por vestuarios, mejorando en defensa y reduciendo la diferencia hasta situarse a solo 6 puntos (65-58), obligando a Burgos a pedir tiempo muerto. La pausa surtió efecto en los locales, que recuperaron aire antes del último cuarto (71-64).
El inicio del último periodo volvió a ser letal para los madrileños. Un parcial de 15-6 devolvía la tranquilidad a los de Burgos, aunque el Estudiantes, tras la expulsión del técnico local Bruno Savignani, aprovechó el caos para acercarse de nuevo (88-80). Sin embargo, en los minutos finales, los locales supieron gestionar su ventaja y sentenciar el choque con un contundente 100-88.
En el apartado individual, destacaron Francis Alonso, máximo anotador del Estudiantes con 24 puntos, y Kravic, que aportó 12 puntos y 7 rebotes. A pesar del esfuerzo, la eficacia ofensiva de Burgos y la profundidad de su banquillo fueron determinantes.
Con esta derrota, Movistar Estudiantes cierra la liga regular centrado ya en el gran objetivo de la temporada: el playoff de ascenso a ACB, donde tratará de aprovechar su experiencia y su capacidad competitiva para volver a la élite del baloncesto español.