Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) ha negado este miércoles la existencia de una plaga de insectos en la Terminal 4 del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, tras las denuncias realizadas por algunos empleados que aseguran haber sufrido picaduras en sus puestos de trabajo.
Según Aena, las empresas especializadas en desinsectación que prestan servicio en la T-4 no han detectado ninguna infestación, aunque sí se han llevado a cabo inspecciones y tratamientos localizados en puntos “muy delimitados” donde se identificó la presencia de insectos. La empresa afirma haber actuado “de forma específica” y en coordinación con las compañías de limpieza y los trabajadores afectados.
La denuncia fue interpuesta por Alternativa Sindical Aena/Enaire (Asae) ante la Comunidad de Madrid, que trasladó la queja a Madrid Salud y, posteriormente, a Sanidad Exterior. El sindicato también ha difundido imágenes de operarios fumigando zonas de mostradores y de trabajadores con picaduras visibles.
Asae ha exigido además el desalojo de entre 300 y 500 personas sin hogar que pernoctan en el aeropuerto, al considerar que su presencia podría tener implicaciones sanitarias. Aena, por su parte, ha subrayado que no hay evidencia directa que relacione las picaduras denunciadas con esta situación.
Asimismo, la empresa ha asegurado que el aeropuerto es un espacio “seguro”, en el que se llevan a cabo tareas de limpieza constantes mediante tres contratos distintos, uno de ellos dedicado en exclusiva a la Terminal 4. Las tareas incluyen acciones de higienización y control de plagas, en caso de ser necesario.
La polémica ha llegado al ámbito político. El senador del PP Agustín Almodóvar ha registrado una pregunta al Gobierno para conocer qué medidas se están tomando para garantizar la seguridad e higiene en el aeropuerto, y si existe alguna relación entre esta situación y la presencia de personas sin hogar. El PP también ha advertido del impacto negativo que podría tener esta situación en la imagen turística de España.
El secretario general del sindicato Asae, Antonio Llarena, ha denunciado un “deterioro sin precedentes” de la terminal y ha calificado la situación de “ciudad sin ley”, con el crecimiento de mafias y sin techo en el aeropuerto más importante del país.