Aena informará a las personas sin hogar que actualmente pernoctan en el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas de que deberán abandonar las instalaciones, después de que el Ayuntamiento de Madrid haya habilitado un nuevo centro de acogida de emergencia con 150 plazas en el distrito de Latina. El objetivo es redirigir a este colectivo vulnerable a un espacio acondicionado específicamente para ofrecer atención social y evitar su permanencia en espacios no habilitados para tal fin.
Desde este lunes, el Consistorio ha puesto en funcionamiento el centro Pinar de San José, dotado con camas, servicios de higiene, alimentación y acompañamiento social, con el fin de dar respuesta a la situación generada por la creciente presencia de personas sin hogar en las terminales del aeropuerto, especialmente en los últimos meses.
Aena no tiene competencias sociales, pero colabora con el Ayuntamiento
En un comunicado, Aena ha subrayado que no ostenta competencias en materia de atención social, pero ha asegurado que colabora estrechamente con el Ayuntamiento de Madrid para facilitar la reubicación de las personas afectadas. Para ello, ha reforzado la coordinación con los equipos de trabajadores sociales municipales, que ya están desarrollando labores de mediación e información entre las personas que ocupan las zonas comunes del aeropuerto.
El gestor aeroportuario ha valorado positivamente el esfuerzo municipal y ha afirmado que celebra la “voluntad de cooperación y el liderazgo” del Ayuntamiento en el despliegue de este nuevo dispositivo, destacando el papel de los equipos de calle, cuya labor ha sido “imprescindible” para canalizar esta transición hacia una atención más digna y especializada.
Una respuesta a una situación creciente
La decisión de actuar sobre la situación en Barajas responde a una realidad visible desde hace meses: la estancia de decenas de personas sin hogar, en su mayoría migrantes o solicitantes de asilo, que habían comenzado a utilizar las instalaciones aeroportuarias como refugio nocturno, especialmente durante las olas de frío y calor extremo. Esta situación generó tanto preocupación humanitaria como problemas operativos para el correcto funcionamiento del aeropuerto.
Con la apertura del centro de acogida, el Ayuntamiento busca garantizar una atención social adecuada, mientras que Aena deja claro que el aeropuerto no puede ni debe convertirse en un espacio de pernocta para personas vulnerables, al no contar con los recursos ni la capacidad para ello.
Medida temporal con seguimiento social
Según han explicado fuentes municipales, el dispositivo de emergencia es una medida temporal, pero con vocación de ser efectiva y sostenible durante los meses más duros del año. El objetivo es evitar situaciones de riesgo, desprotección y cronificación, mediante intervención directa, seguimiento social y orientación a recursos estables del sistema de servicios sociales.
Aena comenzará a notificar formalmente a quienes todavía pernocten en Barajas sobre su obligación de abandonar el recinto y la disponibilidad de una alternativa segura a través del nuevo centro. Las notificaciones se realizarán en colaboración con profesionales sociales para garantizar una comunicación empática y efectiva, acorde con la vulnerabilidad del colectivo.
Esta acción conjunta refleja un ejercicio de corresponsabilidad institucional ante un fenómeno creciente en grandes infraestructuras urbanas, especialmente en contextos de presión migratoria y falta de vivienda asequible.