El influencer gastronómico Cocituber ha denunciado en redes sociales los precios abusivos, la mala calidad de la comida y la falta de limpieza en una de las cafeterías de la estación de trenes de Atocha, en Madrid. Su vídeo, publicado en TikTok y X, se ha vuelto viral en cuestión de horas, con miles de comentarios de usuarios que comparten su indignación por los precios en los establecimientos de estaciones y aeropuertos.
En la grabación, Cocituber narra su experiencia con tono irónico y crítico, calificando la visita como “el mayor acto terrorista culinario jamás visto”. El creador documenta los precios del local y muestra el mal estado de las mesas y del sistema de aire acondicionado.
“Más caro que el billete de tren”
Durante su recorrido, el influencer muestra una botella de agua caliente a 4 euros, un zumo de naranja por 7 euros, una cerveza a 6,75 euros y un bocadillo de jamón y queso de cabra a 8,75 euros. “Más caro que el billete de tren”, ironiza ante la cámara.
Cocituber también denuncia la suciedad generalizada del local, señalando que “nadie limpia las mesas”, y el mal estado de las instalaciones, mostrando goteras del aire acondicionado sobre los comensales. Además, critica la calidad de los alimentos: “La tortilla está congelada, el pan es chicloso y el zumo, incomprensiblemente agrio”, comenta mientras prueba los productos.
Un vídeo viral que reabre el debate sobre los precios en estaciones
El vídeo superó en pocas horas las 500.000 visualizaciones y desató un intenso debate en redes sociales. Numerosos usuarios denunciaron haber vivido situaciones similares en cafeterías de Atocha, Chamartín o el aeropuerto de Barajas, reclamando mayor supervisión de las concesiones de hostelería.
Algunos internautas pidieron que Adif y Renfe impongan límites a los precios en espacios públicos gestionados por empresas privadas, mientras otros criticaron la “falta de competencia real” dentro de las estaciones, lo que permite a los negocios “cobrar lo que quieran”.
Cocituber cierra su vídeo con una advertencia a los viajeros: “Trae tu agua y tu comida de casa. Esto es una vergüenza. Ahí queda mi denuncia pública”.