La ola de calor que asfixia a gran parte de España desde el pasado 3 de agosto comienza a remitir este lunes gracias a la llegada de una masa de aire atlántico que provocará un notable descenso de las temperaturas en la mitad noroeste del país, según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).
Descenso de temperaturas en el noroeste, calor extremo en el sur
El paso de una vaguada inestabilizará la atmósfera y traerá consigo chubascos y tormentas localmente fuertes en áreas del Pirineo y del Sistema Ibérico, acompañadas de rachas de viento muy intensas. Sin embargo, la mitad sudeste peninsular seguirá bajo temperaturas extremas, alcanzando los 40 grados en el valle del Guadalquivir, el bajo Ebro y en zonas interiores de Valencia y Murcia.
En general, las máximas bajarán en buena parte del país, con un descenso más acusado en Castilla y León, Galicia, Asturias y la meseta norte. Pese a ello, en el sur peninsular y Baleares se seguirán superando los 35 grados, al igual que en Canarias, donde además se mantendrá el ambiente cálido y húmedo propio de estas fechas.
Noches tropicales y mínimas elevadas
Las mínimas también experimentarán una caída en el noroeste peninsular y, de forma más ligera, en Baleares y el litoral mediterráneo. Sin embargo, en la mitad sur y en las islas Canarias las noches continuarán siendo tropicales, sin descender de los 20 grados, e incluso sin bajar de los 25 en áreas del Mediterráneo y el valle del Guadalquivir.
Viento cambiante y fuerte en Canarias
En cuanto al viento, la Aemet prevé que sople alisio moderado con intervalos de fuerte en Canarias. En el resto del territorio los vientos serán flojos en general, con intervalos moderados por la tarde. En Baleares y el litoral mediterráneo predominará el flujo del sur y del este, rolando a poniente en el Estrecho y Alborán, mientras que en Galicia y la cornisa cantábrica predominarán los vientos del norte y noroeste.
Fin gradual de la ola de calor
Con este escenario, la previsión apunta a un alivio térmico progresivo en gran parte del país tras una ola de calor que ha dejado temperaturas históricas y ha puesto en alerta a prácticamente toda la Península. Pese al descenso en el noroeste, la Aemet recuerda que las temperaturas seguirán siendo significativamente elevadas en el sureste y zonas insulares, donde la estabilidad atmosférica prolongará la sensación de bochorno unos días más.