El jefe de redes de Vox, Javier Esteban, ha solicitado la baja inmediata como militante y ha abandonado todas sus responsabilidades en el partido tras haber sido denunciado por un presunto delito de acoso sexual a un menor. La decisión, según ha explicado el propio Esteban, busca evitar cualquier perjuicio a la formación mientras se esclarecen los hechos.
En un mensaje publicado en la red social X, Esteban se ha declarado inocente de manera rotunda y ha asegurado que nunca ha agredido a nadie. Además, ha vinculado la denuncia con un conflicto interno en la organización juvenil Revuelta, de la que fue miembro, señalando directamente al presidente y al secretario general de dicha entidad, Jaime Hernández y Pablo González Gasca.
Acusaciones cruzadas y conflicto interno
Según el relato de Esteban, el origen del enfrentamiento se remonta al pasado 30 de noviembre, cuando exigió explicaciones sobre la gestión económica de Revuelta, afirmando que Hernández y González Gasca se negaron a mostrar unas cuentas que, según él, “solo ellos manejan”. A partir de ese momento, denuncia haber sido objeto de filtraciones, audios y acusaciones falsas destinadas a desacreditarle personalmente.
El ya exdirigente de Vox subraya que la denuncia por presunto acoso se ha presentado dos años después de los supuestos hechos, pero apenas unos días después de que reclamara transparencia económica en la organización juvenil. “Cualquiera puede ver la relación temporal”, sostiene, insistiendo en que se trata de una represalia y no de hechos reales.
Reacción de la dirección nacional de Vox
Fuentes de la dirección nacional de Vox han indicado que no pasa desapercibida la coincidencia temporal entre ambas denuncias y han apelado a la presunción de inocencia, confiando en que Javier Esteban pueda demostrarla en el ámbito judicial. Desde el partido subrayan que la salida del responsable de redes responde a una decisión personal del afectado.
Salida voluntaria para no dañar al partido
En su comunicado, Esteban recalca que “nada de esto tiene que ver con Vox” y explica que su baja como militante y su renuncia al cargo obedecen exclusivamente a su voluntad de no perjudicar a la formación política. Al mismo tiempo, mantiene su acusación contra los dirigentes de Revuelta, a quienes atribuye un intento de “quedarse con la organización y seguir ocultando unas cuentas sin control”.
El exresponsable de redes concluye su mensaje asegurando que demostrará su inocencia y dejando una afirmación final cargada de contundencia: “Dudo mucho que otros puedan hacer lo mismo”.