La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha criticado duramente la propuesta del Gobierno central de reducir la jornada laboral sin reducción salarial, calificándola de "profundamente tirana e insensata". Según Ayuso, la iniciativa responde a una estrategia política de la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, para generar titulares y tratar de frenar su caída en las encuestas.
“Cada empresa es un mundo”
Durante la inauguración del centro especializado en prevención y tratamiento de infecciones de transmisión sexual Sandoval II, la presidenta madrileña insistió en que no se puede aplicar una medida de este tipo de manera generalizada, sin atender a la diversidad de las empresas.
"No es lo mismo una empresa con tres empleados que una con 500. Pregunten a cualquier autónomo o pequeño empresario si esto se puede hacer de esta manera", afirmó. Además, subrayó que muchas compañías ya cuentan con convenios internos que permiten flexibilidad en la jornada laboral, incluyendo el teletrabajo.
Para Ayuso, este tipo de medidas perjudican especialmente a los pequeños empresarios, autónomos y comerciantes, que ya enfrentan dificultades con la burocracia y la presión fiscal. "Siempre sacrifican al autónomo, al tendero, al pequeño empresario. Cada vez somos menos competitivos en un mercado global, mientras en el resto del mundo emergen potencias con crecimientos exponenciales", lamentó.
Crítica a la subida del salario mínimo: “Un golpe en cascada”
Díaz Ayuso también arremetió contra la reciente subida del salario mínimo interprofesional (SMI), aprobada por el Gobierno central, argumentando que la medida se ha impuesto sin diálogo con los empresarios y sin evaluar su impacto real en la economía.
"Cada vez que se toman medidas de brochazo gordo, el que paga es el pequeño empresario y el autónomo. No se puede hacer así, porque lo único que se consigue es arruinar a quienes crean empleo" expresó la presidenta.
En su opinión, este tipo de decisiones generan un efecto dominó en la economía, afectando tanto a grandes empresas como a pymes y autónomos: "Cuando golpeas a una gran empresa, la mediana y la pequeña también se ven afectadas, porque tienen relaciones directas con ellas".
"Se transmite a los jóvenes que trabajar es malo"
Uno de los puntos más polémicos de su discurso fue su crítica a la cultura laboral en España y el impacto de estas medidas en la mentalidad de los jóvenes. "Se les está transmitiendo la idea de que trabajar es malo. Eso es un problema del primer mundo. Decir que trabajar es malo es insensato y un mensaje alejado de la realidad", aseguró.
Para Ayuso, la clave para mejorar los salarios y las condiciones laborales no es imponer restricciones al sector privado, sino apostar por la reducción de impuestos, la flexibilización del mercado laboral y el apoyo a los empresarios que generan empleo.
Ayuso se posiciona contra la política económica del Gobierno
Con estas declaraciones, la presidenta madrileña reafirma su oposición a las políticas económicas del Ejecutivo de Pedro Sánchez, especialmente en lo que respecta a la regulación del mercado laboral. Ayuso ha insistido en que, en lugar de imponer restricciones y subir costes laborales, se debe facilitar la contratación y apoyar la competitividad de las empresas.
"Vamos en la dirección contraria de lo que necesita España. Esto solo servirá para generar más titulares durante unos días, pero tendrá consecuencias negativas a largo plazo", concluyó.