El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha cargado este domingo con dureza contra el exsecretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, al considerar que la retención de su acta de diputado, tras conocerse el informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que lo vincula al cobro de comisiones ilegales, responde a una estrategia para evitar que se obtengan más pruebas en su contra.
“Me parece que está tratando de evitar que haya más pruebas y por eso no ha entregado su acta de diputado. Es escandaloso que no lo haya hecho y más aún que no haya ninguna reacción del Gobierno ni del PSOE”, expresó Almeida tras clausurar una liga de debate juvenil.
Cerdán asegura que dimitirá el lunes
Pese a las presiones, Cerdán ha anunciado que entregará su acta el lunes y que renunciará así al aforamiento parlamentario, alegando que no desea valerse de privilegios legales para demostrar su inocencia. No obstante, su decisión ha levantado suspicacias, dado que no la formalizó ni el viernes ni el sábado, a pesar de que tenía margen para hacerlo de forma presencial y telemática.
Almeida ha insistido en que la entrega del acta "es tan simple como presentar un papel" y ha puesto en duda la credibilidad del compromiso de Cerdán, mientras sigue aferrado a su escaño. Para el regidor, no hay más explicación plausible que la de una estrategia dilatoria que favorezca su defensa mientras mantenga el blindaje del Congreso.
Denuncias de degeneración institucional
El alcalde popular ha enmarcado este caso en un proceso de degradación democrática y corrupción institucional que, según dijo, exige una “limpieza profunda” y pasa por “acabar con el sanchismo”.
Ha lamentado también que el partido Vox “equipare al PP con el PSOE” en cuestiones de corrupción, calificando esa postura de injusta y perjudicial. “El PP es la única alternativa real para ofrecer un gobierno limpio y honesto. Es asombroso que Vox nos sitúe en el mismo plano”, declaró.
Más reacciones políticas
El caso sigue generando un notable terremoto político, con declaraciones contundentes desde distintos frentes:
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Alberto Núñez Feijóo, líder del PP, ha reiterado que Pedro Sánchez “tiene que irse por mentiroso y cómplice”, acusándole de haber mirado “para otro lado” ante la corrupción en su entorno.
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La eurodiputada de Podemos, Irene Montero, sostuvo que Sánchez aún tiene “muchas explicaciones que dar” y denunció una “trama estructural de corrupción dentro del PSOE”, más allá de casos aislados como los de Ábalos, Cerdán o Koldo García.
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Desde el PSOE aragonés, el exlíder regional Javier Lambán vinculó directamente a Cerdán con la dirección actual del partido en Aragón, asegurando que "le deben todo" y acusándole de “acabar con lo que yo representaba”.
Escalada política y judicial
La crisis abierta por el llamado "caso Koldo" ha salpicado directamente a la cúpula del PSOE y ha motivado que el PP exija la comparecencia de Sánchez en el Congreso, mientras se tramita un posible pleno extraordinario para forzar explicaciones parlamentarias.
Mientras tanto, la Fiscalía Europea estudia intervenir en la investigación por posible malversación de fondos comunitarios, tras vincularse varias adjudicaciones del caso con dinero procedente del Plan de Recuperación y Resiliencia de la UE.
El escenario político se complica para el Ejecutivo, con los socios de investidura tomando distancia y pidiendo aclaraciones, mientras Santos Cerdán mantiene su escaño al menos hasta este lunes.
