Absentismo laboral

Absentismo laboral: más de un millón de sillas vacías cada día pone en jaque a la economía española

El absentismo laboral alcanza cifras récord en España y cuesta más de 20.000 millones al año. Jhasa propone una solución innovadora con enfoque asegurador

responsabilidad social y la conciliación laboral - Comunidad de Madrid
photo_camera responsabilidad social y la conciliación laboral - Comunidad de Madrid

Más de un millón de trabajadores faltaron a diario a su puesto en España durante 2024, elevando el absentismo laboral a niveles críticos. Esta “otra pandemia” silenciosa no solo afecta al ritmo de trabajo, sino que cuesta al país más de 20.000 millones de euros anuales, una cifra que equivale al 1 % del Producto Interior Bruto (PIB), según datos sectoriales.

Evolución absentismo
Evolución absentismo

Sectores como el de la limpieza, con tasas de inasistencia que superan el 10 %, ilustran el alcance de un fenómeno que está erosionando la competitividad empresarial, disparando los costes operativos y comprometiendo el bienestar de los empleados. En 2023, se perdieron 396 millones de jornadas laborales, un 62 % más que en 2018.

El reto estratégico de la salud emocional

En este contexto, Jhasa, correduría especializada en seguros y reaseguros, ha decidido afrontar el absentismo como algo más que un problema económico. Desde su división People Solutions, liderada por Diana Hernández, la compañía propone un nuevo enfoque asegurador que sitúa el bienestar físico y emocional de los trabajadores como palanca de productividad y fidelización del talento.

“Las empresas que priorizan el bienestar físico y emocional de sus equipos no solo mejoran su clima interno, sino que también obtienen ventajas competitivas claras en productividad, retención de talento y reducción de costes”, señala Hernández.

El peso creciente de la salud mental

El informe también alerta sobre el incremento de las bajas por motivos psicológicos. Actualmente, la salud mental representa ya el 15 % de las incapacidades temporales, con una duración media de cuatro meses por proceso. Estrés, ansiedad y depresión, impulsados por la presión constante y la incertidumbre, se han convertido en los principales enemigos invisibles del entorno laboral.

Frente a este nuevo paradigma, Jhasa ha diseñado seguros de salud colectivos personalizados, con un enfoque proactivo que permite anticipar y mitigar los riesgos derivados del deterioro emocional, incorporando servicios de atención psicológica, seguimiento médico y formación en bienestar.

Un modelo con impacto probado

La estrategia impulsada por People Solutions ya ha empezado a dar frutos. En empresas que han adoptado estos seguros diseñados a medida, se han registrado descensos de hasta un 30 % en las tasas de absentismo, además de mejoras en el compromiso interno y la estabilidad de las plantillas.

Entre los casos de éxito destaca el acuerdo alcanzado con AFELIN, federación nacional del sector de la limpieza, donde se han desplegado soluciones adaptadas a las necesidades concretas de uno de los sectores más afectados por las ausencias laborales.

Más allá del seguro: cultura de empresa y sostenibilidad

Para Hernández, invertir en salud laboral va más allá del aseguramiento clásico. Supone “transformar la cultura empresarial, dotar de valor real al salario emocional y proteger el activo más importante de una organización: las personas”.

“No hablamos solo de pólizas, sino de crear entornos saludables que reduzcan el estrés, mejoren la conciliación y generen sentido de pertenencia”, explica la experta.

Un modelo replicable en todos los sectores

El abordaje estratégico del absentismo que propone Jhasa no está limitado a sectores concretos. El modelo, aseguran, es escalable y replicable en todo tipo de empresas, especialmente en aquellas que operan con recursos humanos intensivos o en entornos de alta exigencia.

Frente a un fenómeno que amenaza con cronificarse, Jhasa lanza un mensaje claro: invertir en bienestar no es un coste, sino una apuesta rentable y urgente. Porque mientras las cifras del absentismo crecen, la solución puede estar en una gestión moderna, centrada en las personas y con visión de futuro.