El histórico frontón Beti Jai, joya arquitectónica del siglo XIX situada en el corazón de Chamberí, ha sido galardonado con el Premio Nacional de Restauración y Conservación de Bienes Culturales 2025, otorgado por el Ministerio de Cultura. El jurado ha destacado la intervención promovida por el Ayuntamiento de Madrid como “un ejercicio innovador de corresponsabilidad entre la ciudadanía y la administración para devolver a la ciudad un espacio único”.
Un emblema recuperado de la arquitectura del hierro
El proyecto de recuperación del Beti Jai, diseñado en 1894 por el arquitecto Joaquín Rucoba, ha sido reconocido por su excelencia técnica y su respeto por el patrimonio original. Tras décadas de abandono y deterioro, el edificio fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 2011, expropiado en 2015 e intervenido entre 2015 y 2019, con una inversión cercana a 40 millones de euros.
La restauración permitió restituir la estructura original del graderío, las fachadas y cubiertas y devolver su esplendor a una de las construcciones más singulares de la arquitectura del hierro en Europa. El proyecto fue impulsado por el Área de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid, que presentó la candidatura premiada al Ministerio de Cultura.
El jurado ha valorado especialmente el carácter participativo de la iniciativa, en la que instituciones y sociedad civil trabajaron de la mano para rescatar un patrimonio que forma parte de la identidad madrileña.
Del abandono a la vida cultural
La reapertura del Beti Jai en 2024 marcó el inicio de una nueva etapa para el histórico recinto, que ha sido convertido en un espacio cultural y deportivo de referencia. Desde su inauguración, el frontón ha acogido visitas guiadas, talleres, conciertos, itinerarios teatralizados y exhibiciones de pelota vasca, además de ofrecer un centro de interpretación y una página web interactiva dedicada a su historia.
En menos de dos años, más de 145.000 personas han participado en las actividades organizadas en el recinto, consolidando el Beti Jai como un nuevo polo de vida ciudadana en Madrid.
“El Beti Jai no es solo un edificio recuperado, es un símbolo de la memoria viva de la ciudad”, subrayan desde el Área de Cultura. “Representa la capacidad de las instituciones y los ciudadanos para rescatar juntos un patrimonio que pertenece a todos”.
El ‘efecto Beti Jai’: alianza entre cultura y ciudadanía
La candidatura premiada destaca lo que se ha denominado el ‘efecto Beti Jai’, una transformación que va más allá de la restauración física del inmueble. El proyecto ha devuelto a Madrid un espacio emblemático y ha puesto en valor la colaboración entre la sociedad civil y la administración pública.
La plataforma ciudadana Salvemos el frontón Beti Jai, que durante años impulsó la defensa del edificio frente al abandono, jugó un papel fundamental en el proceso de recuperación. Su perseverancia y la implicación del Ayuntamiento hicieron posible que el espacio, cuyo nombre significa “Siempre Fiesta”, recupere su espíritu original: un lugar para la cultura, el deporte y la convivencia.
Un patrimonio vivo en el corazón de Chamberí
La intervención del Beti Jai ha sido reconocida no solo por su rigor arquitectónico, sino también por su capacidad para integrar la conservación del patrimonio en la vida cotidiana de la ciudad. Hoy, el recinto combina la herencia del pasado con un uso contemporáneo, abierto a vecinos, visitantes y creadores.
Con este galardón, el Ministerio de Cultura reafirma el valor de las políticas locales orientadas a proteger y reactivar el patrimonio histórico. El Ayuntamiento de Madrid celebra el reconocimiento como un ejemplo de gestión pública eficaz y sostenible, que conjuga memoria, cultura y participación ciudadana.
El Beti Jai, declarado Bien de Interés Cultural, se consolida así como uno de los grandes referentes de la arquitectura madrileña y europea del siglo XIX, y como un espacio que, más de un siglo después de su construcción, vuelve a estar lleno de vida.