Vivienda

Vox propone un plan de vivienda con bloques protegidos para españoles y veto a alquileres a inmigrantes ilegales

La formación liderada por Santiago Abascal presenta su nuevo programa económico con medidas de corte restrictivo en inmigración y un fuerte impulso a la propiedad de vivienda para nacionales

En la imagen, José María Figaredo y Carlos H. Quero, que presentaron el acto de Vox
photo_camera En la imagen, José María Figaredo y Carlos H. Quero, que presentaron el acto de Vox

Vox ha presentado este domingo su programa económico y de vivienda, centrado en una reforma profunda del mercado inmobiliario bajo el lema ‘El Hexágono de la Prosperidad’. Entre las propuestas más destacadas, el partido plantea “inundar España de bloques de vivienda protegida” y prohibir el arrendamiento a inmigrantes en situación irregular, como parte de su política de priorizar el acceso a la vivienda para “las familias españolas”.

El acto de presentación, tras la Asamblea General Ordinaria del partido, estuvo dirigido por José María Figaredo y Carlos H. Quero, quienes defendieron estas medidas como respuesta a “la crisis habitacional y el desarraigo social” que, en su opinión, sufren los ciudadanos españoles.

Más inversión y colaboración público-privada

Vox denuncia que actualmente solo el 1,12 % del gasto público se destina a vivienda y propone multiplicar este porcentaje, tomando como referencia el 13 % de los años 60. El plan contempla colaboraciones público-privadas, cesiones de suelo, subvenciones, créditos blandos y descuentos fiscales para promover la construcción masiva de vivienda protegida.

Asimismo, abogan por eliminar el “secuestro” de suelo que achacan a las administraciones, promoviendo reformas legislativas para incrementar la edificabilidad y reducir la burocracia urbanística.

Políticas de exclusión para inmigración irregular

Una de las propuestas más controvertidas del plan es la prohibición expresa del alquiler a inmigrantes sin permiso de residencia, así como la persecución del empadronamiento fraudulento. Esta medida busca, según el partido, “garantizar que la vivienda pública y social se destine a quienes tienen arraigo y derechos adquiridos en España”.

También se contempla una fiscalidad diferenciada para compradores no comunitarios, con el fin de frenar la inversión extranjera especulativa. La recaudación generada se destinaría a bonificaciones para compradores nacionales.

Fomento de la propiedad y beneficios fiscales

En materia fiscal, Vox propone eliminar el IVA en la compra de la primera vivienda, recuperar la deducción por inversión habitual y bonificar al 100 % las donaciones familiares destinadas a vivienda. Además, plantea la posibilidad de anticipar parte de la futura pensión para facilitar el acceso a la propiedad entre los jóvenes.

También propone créditos blandos vinculados al número de hijos y condonaciones parciales al cumplir metas de natalidad, reforzando su línea de impulso a la natalidad como política de Estado.

Combate a la ocupación y control del alquiler turístico

Vox propone medidas de “tolerancia cero” frente a la ocupación ilegal de viviendas, derogando leyes que considera proteccionistas con los ocupas. Además, plantea regular las viviendas turísticas y reforzar la inspección de aquellas ilegales, al tiempo que incentiva el alquiler de larga duración con deducciones agresivas en el IRPF para jóvenes.

Reequilibrio territorial y vuelta al campo

El programa contempla también una reindustrialización de núcleos rurales y ciudades intermedias, con el fin de frenar el éxodo hacia las grandes urbes. Para ello, Vox propone impulsar infraestructuras, servicios, ocio y comunicaciones en el entorno rural, apostando por “devolver oportunidades a la España olvidada”.

Cumplimiento del artículo 47 de la Constitución

En su exposición, los portavoces de Vox defendieron que “el Estado debe cumplir directamente con el artículo 47 de la Constitución”, que garantiza el derecho a una vivienda digna, “en lugar de trasladar esa responsabilidad a los propietarios particulares”.

Con este plan, Vox busca capitalizar el malestar creciente por los precios del alquiler, la falta de acceso a la vivienda y el aumento de la población extranjera en algunas zonas, en un discurso que mezcla propuestas de intervención estatal y exclusión migratoria como ejes vertebradores de su política social.