La Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) ha presentado un contundente documento con 43 alegaciones contra el proyecto de ordenanza de terrazas elaborado por el Ayuntamiento.
La entidad considera que la norma supone una oportunidad perdida para compatibilizar la actividad hostelera con el derecho al descanso de los residentes y solicita su retirada inmediata para abrir un proceso de diálogo real.
Un texto continuista con la ordenanza anulada en 2022
El colectivo vecinal denuncia que el borrador municipal es continuista con la Ordenanza 1/2022, tumbada por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid por carecer de informes de impacto presupuestario y medioambiental. Según la FRAVM, el nuevo texto repite errores al estar diseñado “en función de las necesidades del sector de la hostelería” e ignorar las demandas ciudadanas.
Propuestas vecinales: horarios más estrictos y límites al espacio público
Entre las principales reclamaciones, los vecinos exigen:
- Cierre de terrazas a las 23:00 horas en zonas residenciales y a las 2:00 en zonas no residenciales alejadas de viviendas.
- Prohibición de terrazas adosadas a fachadas, taburetes y mesas de baja ocupación, que dificultan la movilidad peatonal.
- Limitación de la ocupación de espacio público a un máximo del 50% del interior del local.
- Prohibición de apilar mobiliario en la vía pública y de veladores climatizados en entornos residenciales.
La FRAVM también plantea una moratoria para los quioscos permanentes de hostelería, al considerar que agravan la saturación del espacio urbano.
Un Consejo de Terrazas y más control municipal
El documento propone la creación de un Consejo de Terrazas con representación de asociaciones vecinales, comerciantes, hosteleros y colectivos de discapacidad. Este órgano tendría un carácter consultivo y participativo en el desarrollo de la ordenanza.
En cuanto al régimen sancionador, aunque se endurecen las multas, los vecinos alertan de que las medidas “pueden quedar en papel mojado” si no se refuerzan los recursos de vigilancia. La FRAVM sugiere la creación de una figura específica similar a los Agentes de Movilidad para garantizar el cumplimiento.
Participación ciudadana insuficiente
La federación también critica que la mayor parte del periodo de información pública coincidiera con agosto, un mes vacacional, y que la consulta en Decide Madrid se limitara a preguntas cerradas, con la participación de apenas 5.838 personas, el 0,16% del censo de la ciudad.
Por todo ello, la FRAVM insiste en volver a la casilla de salida y elaborar una norma más equilibrada que no enfrente el derecho al ocio con el derecho al descanso.