Este domingo, Madrid volverá a vestirse de deporte popular con la celebración del 43º Trofeo San Lorenzo, una cita ya clásica en el calendario estival de la ciudad. A partir de las 9:00 horas, centenares de corredores tomarán la salida en una prueba que no solo representa una jornada de ejercicio físico, sino también el pistoletazo de salida a las fiestas patronales de Santiago, Santa Ana y San Roque en el castizo barrio de Lavapiés.
El recorrido principal, reservado para participantes mayores de 16 años, consta de 10 kilómetros que discurren por algunos de los lugares más emblemáticos del centro de la capital. Las rondas de Atocha, Valencia, Toledo y Segovia, el paseo de la Virgen del Puerto, la cuesta de San Vicente, la calle Bailén, Gran Vía de San Francisco, la Puerta de Toledo, las calles Sacramento y Mayor, la Puerta del Sol y el paseo del Prado son algunos de los enclaves por los que transitarán los corredores, para finalizar en la siempre animada calle Argumosa.
Además del trazado principal, el Trofeo San Lorenzo ofrece otras dos versiones adaptadas a los más jóvenes. Para corredores de entre 8 y 15 años, se ha preparado un recorrido infantil de 950 metros, con salida y meta también en Argumosa, que recorrerá las calles Doctor Fourquet, Valencia, Salitre y Doctor Piga.
Para los más pequeños, de entre 5 y 7 años, habrá un recorrido benjamín de apenas 50 metros, diseñado para garantizar la seguridad y la diversión de los menores, también sobre el trazado de la calle Argumosa.
El evento no es solo una fiesta deportiva, sino también un acto de identidad barrial profundamente vinculado al espíritu comunitario de Lavapiés, que cada verano rinde homenaje a su patrón San Lorenzo con una completa agenda que combina deporte, cultura, gastronomía y tradición.
La carrera será seguida por numerosos vecinos, familiares y visitantes, muchos de los cuales permanecerán en la zona para participar en los actos festivos que se sucederán a lo largo de los próximos días. La procesión de San Lorenzo, actuaciones musicales, actividades infantiles y comidas populares completarán un programa que convierte a Lavapiés en uno de los focos de animación del verano madrileño.
Desde la organización se ha reforzado el operativo de seguridad y asistencia médica, además de haber desplegado personal voluntario a lo largo del circuito para garantizar el correcto desarrollo de la jornada.
El Trofeo San Lorenzo, con más de cuatro décadas de historia, se consolida un año más como una celebración del espíritu vecinal, la cultura popular y el deporte accesible para todos los públicos, reafirmando su papel como uno de los grandes eventos populares de Madrid.