El concierto del cantante puertorriqueño Myke Towers en el Movistar Arena de Madrid fue interrumpido momentáneamente este miércoles por la organización del recinto debido a que se superaron los niveles de sonido permitidos, según ha confirmado la empresa gestora del espacio.
La dirección del recinto activó el protocolo acústico establecido, encendiendo durante algunos segundos las luces del pabellón como advertencia visual al equipo técnico del artista. Esta acción, aunque breve, sirvió para que se ajustara el volumen a los límites legales y permitió que el resto del espectáculo transcurriera con total normalidad y sin que el público fuera consciente de la incidencia.
Según el comunicado emitido por la empresa, el exceso de decibelios fue provocado por el reiterado incumplimiento del equipo técnico de Myke Towers, que ya había sobrepasado ampliamente el límite de 102 decibelios, especialmente en la banda de los 100 Hz, correspondiente a los subgraves, durante su primer concierto en el mismo escenario, celebrado el martes.
Esta situación podría haber generado molestias en los vecinos más cercanos al recinto, razón por la cual el Movistar Arena ha insistido en la necesidad de hacer cumplir las normas acústicas. La empresa ha recalcado que este tipo de intervenciones forma parte de un plan de medidas orientadas a minimizar el impacto sonoro en el entorno urbano, en cumplimiento con la normativa y en respuesta a las reiteradas quejas vecinales sobre la contaminación acústica en la zona.
Entre esas medidas figuran también la limitación de horarios de los eventos, que deben finalizar en torno a las 23:00 horas los días laborables, y a las 00:30 horas los fines de semana, además de un sistema de monitoreo continuo del sonido durante las actuaciones.
La actuación de Myke Towers forma parte de su gira internacional y es una de las más esperadas del calendario urbano en la capital, en un recinto con capacidad para 15.000 personas. La advertencia y rápida actuación del Movistar Arena han permitido que el concierto continuara sin cancelaciones ni mayores incidentes, manteniendo la seguridad y el bienestar tanto de los asistentes como del vecindario.
