El evento, que tuvo lugar el sábado 5 y el domingo 6 de abril en el Parque Finca Liana, contó con la participación de 12 bodegas y siete comercios locales, quienes ofrecieron a los asistentes una muestra de lo mejor de la enología madrileña y los productos más destacados de la zona.
La feria permitió a los visitantes disfrutar de una variada selección de caldos, con especial atención a variedades como Rosé, Blanco, Tempranillo, Crianza y Garnacha. Entre las bodegas presentes, se encontraban algunas de las más representativas de la Comunidad de Madrid, como Vinícola de Arganda, Bodegas Andrés Díaz, Vinos de la Poveda, Txinpanzè Vinos, y la bodega de denominación de origen La Rioja, Bodega La Rioja Alta.
El evento no solo ofreció catas de vino, sino que también incluyó música en directo y actividades para los más pequeños, convirtiéndolo en un espacio de convivencia para toda la familia.
El alcalde de Móstoles, Manuel Bautista, acompañado de la concejal de Economía, Industria y Empleo, Ángeles García, visitó la feria el sábado para apoyar a los productores locales y resaltar la importancia de esta iniciativa para la ciudad. Bautista destacó la creciente relevancia de la DO de Madrid en el panorama vinícola y subrayó que Móstoles aspira a convertirse en una parada imprescindible para los amantes del buen vino.
“Móstoles quiere situarse como una parada indispensable para los vinos de la DO de Madrid que, en muy poco tiempo, ha sabido hacerse un hueco en el ámbito de la enología. Además, esta Feria del Vino y del Producto Local es el mejor escaparate para que comercios locales puedan demostrar su extraordinaria calidad a los visitantes”, declaró Bautista.
Los comercios mostoleños también estuvieron presentes en la feria, con stands de empresas locales como Hermanos Escudero, Variantes Raúl, Loemi, Frutos Secos Castilla, Carnicería Pedro Jerez, Charcutería Las Nieves y Cafés 1808, que ofrecieron sus productos más destacados a los asistentes.
Con esta feria, el Ayuntamiento de Móstoles busca promover el reconocimiento de los sectores vinícolas y alimentarios de la región, ofreciendo una plataforma para que los productos locales ganen visibilidad y continúen siendo valorados tanto por los residentes como por los visitantes.
