La Comunidad de Madrid prepara una conmemoración del 2 de Mayo sin precedentes. Este año, por primera vez en la historia de la región, los actos oficiales de este día festivo se celebrarán al aire libre, en plena Puerta del Sol, con la Real Casa de Correos como telón de fondo.
La presidenta Isabel Díaz Ayuso presidirá todas las ceremonias, incluidas la imposición de las Grandes Cruces y la tradicional ofrenda floral a los héroes del levantamiento de 1808.
Con esta iniciativa, el Gobierno regional busca acercar el homenaje a la ciudadanía y hacer partícipe a todo el pueblo madrileño de la celebración institucional más significativa del calendario autonómico. Para ello, se instalarán pantallas gigantes y dos grandes gradas que permitirán al público seguir en directo el desarrollo de todos los actos.
Un homenaje abierto a todos los madrileños
La jornada conmemorativa arrancará con la colocación de la corona de laurel en la placa que honra a los héroes del 2 de mayo, situada en el propio edificio de la sede del Gobierno regional. La presidenta Díaz Ayuso encabezará este gesto simbólico, que cada año recuerda el valor y sacrificio del pueblo madrileño frente a la ocupación napoleónica.
Posteriormente, se celebrará el solemne acto de entrega de las Grandes Cruces de la Orden del Dos de Mayo, una de las más altas distinciones que concede la Comunidad a personas e instituciones destacadas por su labor en favor de la región. Este año, la ceremonia será íntegramente pública, gracias a su traslado a la emblemática plaza del centro de la capital.
La Puerta del Sol, epicentro de la memoria madrileña
Este cambio de escenario tiene como objetivo reforzar la conexión entre los valores históricos del 2 de mayo y el presente de una región que quiere reconocer sus raíces compartidas. La Puerta del Sol, testigo de episodios clave en la historia de España, se convertirá en un gran espacio cívico donde madrileños y visitantes podrán vivir de cerca uno de los días más señalados del año.
La presidenta Ayuso ha impulsado esta apertura como una forma de “celebrar con orgullo la identidad y el espíritu de libertad que representa el Dos de Mayo”. Desde el Ejecutivo regional señalan que se trata de una apuesta por democratizar la ceremonia y devolverla al corazón de la ciudad y de sus habitantes.
