La delegada de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Madrid, Engracia Hidalgo, ha vuelto a poner el foco en la polémica tasa de basuras, una medida que ha generado miles de reclamaciones vecinales desde su implantación. Durante una entrevista en Telemadrid, la responsable municipal reconoció que el Ayuntamiento está “recibiendo muchas reclamaciones porque produce mucha inseguridad jurídica”, aunque recordó que la capital está obligada a aplicarla por una normativa estatal aprobada en 2022.
Hidalgo insistió en que el Consistorio no habría impulsado esta tasa por iniciativa propia: “No nos gusta la tasa de basura, que hemos tenido que poner obligados”. Según explicó, la ley que impone la creación de este tributo exige además que el importe cubra el coste exacto del servicio de recogida de residuos, lo que impide a los ayuntamientos ajustar la tasa según sus propios criterios. La delegada calificó esta normativa como “un desastre” que ha llevado a que cada municipio aplique la tasa de forma distinta, generando desigualdad y confusión.
Pese al descontento, Hidalgo aseguró que el Ayuntamiento atenderá todas las reclamaciones y revisará la tasa para introducir mejoras. La delegada recordó también que el coste medio para los madrileños es de 141 euros al año, y comparó esta cifra con el impacto fiscal del IRPF: “Solo con que se hubiera deflactado el IRPF, cada madrileño se habría ahorrado 400 euros, dos veces y media la tasa”.
Defensa de Madrid 360 y apoyo a los conductores
Sobre las restricciones de circulación que entrarán en vigor el 1 de enero de 2026 para los vehículos sin etiqueta ambiental, Hidalgo defendió que Madrid 360 “ha sido un hito” que ha permitido mejorar de forma notable la calidad del aire de la capital. Recordó que el Ayuntamiento ha invertido 100 millones de euros en ayudas para la renovación de vehículos, insistiendo en que el plan ha buscado equilibrar protección ambiental y apoyo a los ciudadanos.
Reflexión política y situación nacional
En clave estatal, la delegada de Economía y Hacienda consideró que “se dan las condiciones para que Sánchez convoque elecciones”, mencionando la falta de presupuestos durante tres años, la dificultad del Gobierno para aprobar leyes y los recientes casos de corrupción. También criticó las concesiones al independentismo catalán, subrayando que “es momento de dejar hablar a los ciudadanos”.
