La crisis abierta por las nuevas revelaciones del ‘caso Koldo’ sigue sacudiendo al Gobierno de coalición. Sumar, socio del PSOE en el Ejecutivo, ha instado al presidente Pedro Sánchez a tomar medidas contundentes y radicales para atajar la corrupción en las filas socialistas, y ha pedido garantías de que este escándalo no se extiende al conjunto del partido, sino que se circunscribe a casos individuales como José Luis Ábalos, Santos Cerdán y Koldo García.
En una jornada marcada por la tensión y la incertidumbre en el seno del Gobierno, el ministro de Cultura y portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, confirmó que los partidos aliados del Ejecutivo están “en shock” por el contenido de las grabaciones difundidas por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. En ellas aparecen dirigentes socialistas presuntamente implicados en prácticas irregulares, lo que ha generado una profunda desconfianza interna y malestar entre los socios parlamentarios.
Urtasun fue tajante al advertir que los responsables del PSOE deben evitar mensajes justificativos como el de que “la corrupción cero no existe”. En su opinión, ese discurso es “falso y peligroso”, y subrayó que “la corrupción cero sí es posible”. Para defender su postura, recordó que su espacio político ha gobernado grandes instituciones sin verse salpicado por casos similares, reafirmando la necesidad de mantener un compromiso firme con la ética pública y la transparencia.
Por su parte, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, reclamó directamente al presidente Sánchez que acredite que los casos conocidos no son parte de una trama mayor ni reflejan una estructura corrupta dentro del partido. “La ciudadanía necesita saber con exactitud qué ha pasado y tener garantías de que esto no afecta al global del PSOE”, advirtió, dejando entrever que la confianza en el socio mayoritario del Ejecutivo se ha visto seriamente comprometida.
Díaz también anunció que está prevista una reunión entre los partidos del Gobierno para abordar esta situación y avanzar hacia lo que denominó “un nuevo marco de Gobierno”. Entre las medidas propuestas, figura la creación de una agencia estatal anticorrupción, con competencias claras y recursos suficientes para prevenir y perseguir estas prácticas.
Tanto Urtasun como Díaz coincidieron en que es urgente dar un “giro de 180 grados” en la gestión del Ejecutivo y ofrecer respuestas convincentes a la sociedad. Díaz calificó de “vodevil” y “falta de respeto” el tono del último Pleno del Congreso, donde PP, Vox y parte del propio bloque de investidura cuestionaron al Gobierno por su respuesta a la crisis.
Mientras el escándalo sigue creciendo, la coalición gubernamental se encuentra en uno de sus momentos más delicados. Sumar insiste en que no permitirá que su credibilidad se vea dañada por actuaciones ajenas y, aunque descarta una ruptura inmediata, exige acciones concretas e inmediatas por parte del PSOE para recuperar la confianza ciudadana y sostener la estabilidad política del país.
