Sánchez insta al PSOE a cerrar filas y seguir avanzando tras el caso Cerdán: "Hay que dar la batalla"
El presidente del Gobierno pedirá hoy al Comité Federal dejar atrás el escándalo de corrupción y renovar el liderazgo con nuevos nombres y medidas éticas
Pedro Sánchez afronta este sábado uno de los Comités Federales más relevantes de su mandato al frente del PSOE, con un mensaje claro: pasar página del ‘caso Cerdán’ y continuar aprobando políticas progresistas. En plena tormenta interna y mediática, el líder socialista buscará el respaldo de los 315 miembros convocados en la sede de Ferraz para consolidar una nueva etapa en el partido.
Según fuentes próximas al presidente, su intervención estará centrada en reforzar la unidad, renovar la estructura del partido y dejar claro que la lucha contra la corrupción y por los derechos sociales sigue intacta. Sánchez pretende dejar atrás el escándalo que ha salpicado a su exsecretario de Organización, Santos Cerdán, presuntamente vinculado a una trama de comisiones ilegales por contratos públicos.
Renovación interna y medidas éticas
Como parte de este giro, Sánchez impulsa una profunda reestructuración de la Ejecutiva Federal del PSOE. Ya ha comunicado a varios dirigentes su salida del órgano por incompatibilidades estatutarias, incluidos perfiles destacados como Esther Peña, quien dejará también la portavocía. En su lugar, Montse Mínguez será la nueva portavoz federal, y Enma López asumirá una portavocía adjunta.
Uno de los nombres más relevantes de esta nueva etapa será Rebeca Torró, que ocupará la Secretaría de Organización, puesto que ostentaba Cerdán. Torró estará arropada por un equipo reforzado que incluye a Anabel Mateos, Francisco J. Salazar y Borja Cabezón, como parte de la estrategia de Sánchez para recuperar la credibilidad del aparato.
Junto con esta renovación orgánica, el PSOE aprobará también una enmienda al Código Ético que permitirá la expulsión de militantes que usen servicios de prostitución, reforzando así su perfil abolicionista. Esta medida llega tras los audios filtrados del exministro Ábalos y su asesor Koldo García, en los que aparecen comentarios sexistas y denigrantes hacia mujeres.
Reafirmación ideológica y mensaje de continuidad
Sánchez quiere proyectar que el partido no se detiene ante las adversidades. Bajo el lema interno de “seguir dando la batalla”, pretende relanzar el rumbo político del PSOE sin convocar elecciones ni aceptar la posibilidad de un congreso extraordinario, como pedían voces como Gómez de Celis o Fernández Vara.
A pesar de las tensiones internas, Sánchez se mantiene firme. Ni dimisiones adicionales ni comicios anticipados, aseguran fuentes de Ferraz. El presidente se centrará en consolidar su liderazgo y revalidar el apoyo de los suyos para culminar la legislatura.
Se prevé una sesión intensa, con más de 30 intervenciones pedidas por parte de los miembros del Comité Federal. Algunas de ellas serán críticas, encabezadas por figuras como Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, quien ha adelantado que tomará la palabra. Aunque otros muchos dirigentes apoyarán al presidente, piden firmeza para evitar que el escándalo se convierta en un desgaste irreversible para el PSOE.
Estabilidad del Gobierno y relación con Sumar
Sánchez también se esforzará en despejar cualquier sospecha sobre una posible financiación ilegal del partido, subrayando que hasta ahora no hay indicios judiciales que afecten directamente al PSOE como organización. Este mensaje es clave para mantener la alianza con sus socios parlamentarios, especialmente Sumar, que ha endurecido su discurso, aunque sin romper la coalición de Gobierno.
Desde el entorno de Sánchez se insiste en que no hay margen político para una ruptura. Aseguran que las diferencias actuales con Sumar responden a una necesidad de “marcar perfil” en un momento de alta tensión mediática, pero que la estabilidad del Ejecutivo no está en peligro.
Un giro feminista y de control de daños
Con la medida sobre la prostitución y el cambio de portavocía, Sánchez busca tranquilizar al sector feminista del partido, muy crítico en los últimos días por la falta de respuesta al contenido de los audios de Ábalos y Koldo. En ese sentido, la reunión mantenida ayer con Cristina Narbona, Pilar Bernabé y otras dirigentes clave, ha sido decisiva para alinear posiciones antes del cónclave socialista.
El Comité Federal de este sábado será clave para medir la autoridad política de Pedro Sánchez dentro del PSOE tras el terremoto de Cerdán. El presidente buscará consolidar su liderazgo con una nueva estructura, medidas ejemplares y un relato centrado en la continuidad de la agenda progresista.
A la espera de su comparecencia en el Congreso el próximo 9 de julio, Sánchez encara este nuevo reto con una máxima: cerrar filas, renovar el PSOE y recuperar la iniciativa política. La batalla sigue. Y, según su entorno, no está dispuesto a perderla.