Conciertos

Madrid, entre las ciudades más baratas de Europa para asistir a conciertos, mientras Barcelona se cuela en el top 5 de las más caras

Conciertos Madrid 2024 - Freepik

Un estudio de SeatPick sitúa a Madrid con un precio medio de 106 € por entrada, frente a los 127 € de Barcelona, una de las más caras del continente

La ciudad en la que se celebra un concierto puede marcar una gran diferencia en el bolsillo de los fans. Así lo revela un nuevo estudio de SeatPick, que analiza el precio medio de las entradas para conciertos de artistas internacionales en más de 40 grandes capitales europeas.

El informe muestra un mapa desigual en el coste de la música en directo: mientras algunas ciudades permiten disfrutar de grandes espectáculos por menos de 80 €, en otras el precio medio supera con creces los 150 €. La diferencia llega a ser tan marcada que, en algunos casos, ver al mismo artista puede costar hasta el doble según la ciudad en la que actúe.

Madrid, entre las más asequibles

Con un precio medio de 106 € por entrada, Madrid se ha colado en el top 10 de las ciudades más baratas de Europa para disfrutar de música en directo. La capital española se sitúa por delante de Londres (108 €), Berlín (122 €) o Milán (118 €), y se acerca a otras urbes como Lisboa (89 €) o Ámsterdam (98 €).

El ranking de ciudades más económicas lo encabezan:

  • Oslo – 77 €

  • Praga – 79 €

  • Manchester – 85 €

  • Helsinki – 86 €

  • Budapest – 88 €

El informe destaca que Madrid combina la oferta de grandes recintos como el WiZink Center o el Estadio Metropolitano con una red de salas medianas y espacios alternativos, lo que contribuye a mantener un coste medio más accesible para el público.

Barcelona, en el grupo de las más caras

En el otro extremo se encuentra Barcelona, con un precio medio de 127 €, que la sitúa entre las cinco ciudades más caras de Europa. Solo la superan capitales con un alto coste de vida como Roma (158 €), Estocolmo (153 €), Bruselas (133 €) y Viena (129 €).

El listado de las más costosas lo completan Zúrich (124 €), Berlín (122 €), Lyon (121 €), Milán (118 €) y Múnich (118 €).

Según el análisis, estos precios pueden convertirse en un freno para parte del público local, especialmente para los jóvenes, en un contexto en el que la inflación ha encarecido de forma directa el acceso al ocio cultural. Barcelona, pese a su gran atractivo turístico y cultural, corre así el riesgo de convertirse en un destino exclusivo para los fans con mayor poder adquisitivo.

Un mercado cada vez más desigual

El estudio recuerda que la comparativa se ha hecho únicamente con artistas internacionales de primer nivel, dejando fuera a bandas locales y pequeños conciertos, con el objetivo de ofrecer una visión homogénea entre ciudades con un peso cultural similar.

La conclusión es clara: Europa vive una brecha de precios en la música en directo, en la que ciudades como Madrid ofrecen todavía un acceso relativamente asequible, mientras que Barcelona y otras capitales europeas se encarecen hasta un nivel que podría limitar la diversidad del público en los grandes conciertos.