TELEDERMADRID: más agilidad en diagnósticos dermatológicos gracias a su implantación en 17 centros
El objetivo es ofrecer diagnósticos más rápidos y precisos, evitando desplazamientos innecesarios a los pacientes y optimizando la carga de trabajo de los profesionales sanitarios.
Resultados positivos en la fase piloto
El proyecto comenzó en febrero en seis dispositivos de la red pública —tres hospitales y tres centros de salud—, y desde entonces ha tramitado 460 solicitudes. Los resultados reflejan su eficacia: el 90% de los casos se resolvieron en menos de 72 horas, un plazo considerado clave para garantizar la calidad asistencial.
Además, el 53% de los pacientes continúa en seguimiento hospitalario, mientras que un 44% recibe atención directa desde Atención Primaria siguiendo las indicaciones del dermatólogo, lo que contribuye a reducir tiempos de espera y colas en hospitales.
Nuevos centros incorporados al programa
En las últimas semanas, TELEDERMADRID se ha ampliado de forma significativa. El Hospital Universitario Infanta Leonor ha sumado los centros de salud Alcalá de Guadaira y Federica Montseny; La Paz ha incorporado Fuencarral y Bustarviejo; y el Puerta de Hierro Majadahonda, los consultorios Infante Don Luis de Borbón, Cerro del Aire y San Juan de la Cruz.
Asimismo, se han unido al programa el Hospital Universitario del Henares y una red de centros en Coslada (Ciudad San Pablo, Coslada Estación, Doctor Tamames, Jaime Vera, El Puerto y Valleaguado), además de Alperchines y Loeches. También participan los centros de San Fernando de Henares y Velilla de San Antonio.
Cómo funciona TELEDERMADRID
El sistema establece una comunicación directa entre médicos de Atención Primaria y dermatólogos hospitalarios. El facultativo de familia o pediatra evalúa al paciente en la consulta, toma una imagen de la lesión y la envía junto con la información clínica. El especialista revisa el caso y devuelve un informe con el diagnóstico y el tratamiento a seguir.
Este procedimiento resulta especialmente beneficioso para quienes viven en zonas rurales o municipios alejados, donde los desplazamientos a hospitales pueden suponer una dificultad añadida. Además, aumenta la capacidad resolutiva de la Atención Primaria, al permitir que muchos procesos se resuelvan directamente en este nivel asistencial.