Secularización

La secularización avanza en España: solo el 55 % de los adultos se declara católico

La secularización avanza en España: solo el 55 % de los adultos se declara católico

La religiosidad en España continúa cayendo y se consolida una tendencia imparable hacia el secularismo, especialmente entre los jóvenes

España se aleja de su pasado confesional. Según el último informe de Funcas, solo un 55 % de los adultos se identifica como católico, muy lejos del 90 % que se registraba en la segunda mitad de los años 70. El país atraviesa una transformación profunda en su panorama religioso, marcada tanto por el reemplazo generacional como por un abandono progresivo de la fe a lo largo de la vida.

El cambio es generacional, pero también vital. Los datos revelan que la caída de la religiosidad no afecta únicamente a los jóvenes: incluso los mayores han reducido su identificación católica. Por ejemplo, quienes nacieron entre 1943 y 1952 han pasado de identificarse como católicos en un 83 % en 2002 a un 73 % en 2024. En los más jóvenes, el descenso es aún más drástico: entre los de 18 a 29 años, solo un 32 % se considera católico, frente al 60 % de hace dos décadas.

No hay sustitución por otras religiones, sino un crecimiento claro del grupo que no se identifica con ninguna fe. Este colectivo ha pasado de representar el 22 % en 2002 al 42 % en 2024, mientras que las confesiones cristianas no católicas y religiones no cristianas, como el islam, han subido tímidamente del 1-2 % al 3 %.

La práctica religiosa, además, está en mínimos históricos: solo el 17 % de los adultos católicos asiste a oficios religiosos al menos una vez al mes, frente al 28 % en 2002. Entre los jóvenes de 18 a 29 años, apenas el 8 % mantiene esa regularidad, en contraste con el 33 % entre los mayores de 70.

Estos cambios se reflejan también en la vida cotidiana: solo el 18 % de los matrimonios heterosexuales celebrados en 2023 fue por el rito católico, una cifra residual si se compara con el 76 % del año 2000 o el 100 % de 1976. Asimismo, la enseñanza de religión católica en Primaria ha caído del 85 % en 1998 al 56 % en 2023, y en centros públicos esa cifra desciende hasta el 44 %.

España, que durante siglos fue considerada uno de los pilares del catolicismo mundial, se sitúa ahora en una posición intermedia dentro de Europa, en un mapa religioso cada vez más diverso. Con un 42 % de no creyentes, iguala la media europea y se distancia claramente de países como Grecia o Italia, donde la fe sigue siendo dominante.

Los expertos concluyen que, aunque no hay un único destino para la religión en Europa, los datos en España marcan un rumbo claro hacia una sociedad cada vez más secularizada, con implicaciones directas en ámbitos como la educación, el matrimonio y la vida pública.