Formación a más de 3.000 niños y adolescentes vulnerables en competencias digitales
Este esfuerzo forma parte del Programa E-Learning, una iniciativa activa desde 2013 que busca mejorar la experiencia educativa de menores y reducir la brecha digital.
Una colaboración que fomenta el desarrollo tecnológico
El programa se lleva a cabo gracias a un acuerdo entre la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales y la Fundación Sanders. Las actividades incluyen talleres de robótica, programación e impresión 3D, que no solo dotan a los menores de conocimientos tecnológicos, sino que también fomentan habilidades como el pensamiento lógico, la creatividad, y la capacidad de resolver problemas.
Estas actividades se enmarcan dentro del Programa I+I (Programa de Intervención Integral con menores en riesgo social) y tienen lugar en 27 centros especializados I+I y en 55 servicios de prevención gestionados por entidades sociales colaboradoras de la Administración regional.
Programa TIC y TAC: tecnología al servicio del desarrollo personal
Entre las iniciativas tecnológicas se encuentra el Programa de Intervención Socioeducativa TIC y TAC, diseñado para promover el conocimiento de las tecnologías de la información y la comunicación entre niños y adolescentes en situación de riesgo. Este programa tiene como objetivo proporcionar herramientas digitales que contribuyan a su desarrollo personal y académico.
Ampliación a zonas rurales
En el marco del convenio actual, se está llevando a cabo un proyecto piloto para extender el programa a mancomunidades de servicios sociales y municipios de menos de 20.000 habitantes que no cuentan con un centro I+I o servicios de prevención. Esto permitirá llegar a un mayor número de menores en áreas rurales o con menos recursos, garantizando la equidad en el acceso a estas oportunidades educativas.
Impacto positivo en la infancia vulnerable
Con estas iniciativas, la Comunidad de Madrid refuerza su compromiso con la igualdad de oportunidades y la inclusión digital, promoviendo un acceso más justo a las herramientas tecnológicas y ayudando a los niños y adolescentes a superar las barreras educativas y sociales. La formación en competencias digitales no solo abre puertas al futuro profesional de estos menores, sino que también mejora su calidad de vida y fortalece su confianza en un mundo cada vez más tecnológico.