Sencillamente irresistibles

Haciendo aguas

Se acabo lo de conocerle como Sánchez, hay que llamarle “pitoniso” porque  lo sabe todo, lo conoce todo, se mete en todos los fregados, maneja la política europea, la mundial y en todas ellas se siente como pez en el agua, menos quizás en la española que al parecer quiere cargarse (terminar con su soberanía) ….

Sabe quién y cómo gobernar en Alemania, aquí, allá, donde sea.

Tiene clarísimo lo que es necesario acometer para frenar a su “enemigo” Trump ( a quien han votado setenta y siete millones de estadounidenses, cosa que a él no le ocurrirá jamás)  y es el plenipotenciario menos pleno que se sabe y registran los anales de la historia, porque nadie le ha elegido como adalid de nada, pero de la nada más acuosa.

En los pueblos de León se utiliza una palabra para definir a los “metomentodo” la de “Cazoliteros”. Y el Numero Uno  lo es.  

Un cazolitero que se mantiene en el sillón como un malabarista, a cambio de ceder en lo más grande y dar todo a quienes  se lo reclaman, por muy indeseables que sean y por muchos horrores que pidan.

 Lo malo es que otorga lo que no es suyo, o sea, que se apropia indebidamente de lo que no le corresponde y eso tiene un nombre muy feo.

Lo hace sin vergüenza alguna, ya que tener vergüenza no es quizás un  atributo de este jefecillo de tres al cuarto (muy alejado del concepto de líder).

Pues bien, Cazolitero  pitoniso tiene a Pichona catedratica y a “Hermanito musical” además de a otros íntimos colaboradores de su discutible quehacer,  implicados en cositas también muy, muy feas.

Pero nada comparables a las que se sospechan de su persona, que por cierto con tanta actividad  actuando además como escudero de Soros, va perdiendo su perfil  terso y apolíneo y muestra ante las cámaras una cara dura (por firme), llena de cicatrices de acné y de quizás viruela.

Es una pena tal estropicio, debería retirarse a una sauna como esa a la que le invita el primer ministro de Finlandia, conocedor tal vez de  lo “sauni-ano” que es, como buen yerno de Sabini-ano (misma terminación).

Un tritón entre las aguas, que actualmente hace aguas por todas partes.

Es que lo mismo que la cabra tira al monte, estos sauneros tiran a las saunas, como en efecto aquella icónica de su suegro, destinada a gays y llamada “Adán”, que  apagó  definitivamente sus lucecitas verdes de neón algo antes de la pandemia.

Fue rentable en su día, pero últimamente tenía  fama de no muy limpia en sus instalaciones y en sus  rentboys, (hombres que allí se prostituían), muchos de ellos tan brasileños  como  las seis señoritas prostitutas de la pandi de  Koldo y Abalos, destinadas a  agasajar a contratistas del ministerio.

¡Qué ambientazo!, presuntamente nada ajeno a Número Uno, ni por supuesto a Pichona (de casta le viene al galgo y de tal palo, tal astilla)

 Así que por tradición anda como P por rastrojo, con lo de la guerra de Ucrania,  a ver como convence a sus socios  de participar en ella, y a ver cómo  logra pasta para armamento y presuntamente también,  de cómo sacar tajada de todo ello.

Y como en el fondo Trump le trae de cabeza  porque la verdad es que quisiera estar en su pellejo y controlar el mundo, ha recibido como hace el presidente americano a todos los grupos menos a Vox (que demócrata más enorme) en su “despacho Oval” de Moncloa y no en el Parlamento. ¡Que tío más copión, a lo pobre hombre!..

Sería recomendable que su hermanito, ahora en el paro hasta que vuelva a encontrar en google algún trabajo en el que no tenga que trabajar,  le componga  un canto de sirena para engatusar a  doña Ursulina “Border”  a la luz de la luna, o para entonarla a ritmo de samba, y a pesar del frio, en el calor de la sauna  finlandesa.