Las amistades peligrosas
Primero fue Eva, que allá por el paraíso terrenal se hizo “inti” de la serpiente y por su culpa, por la tentación “serpientera” del “come guapa, que está riquísima”, “que no la como, que no es no”, ya, pero “come porque si es si”, acabó haciéndose un lío y mordiendo la trampa de la manzana prohibida.
De esta forma tan absurda lo perdió todo y se quedó sin más que una hoja de parra para tapar sus vergüenzas, y un Adán, tonto de capirote, que de rebote se tragó la engañifa y la dichosa manzana.
Y como todo es cíclico, no resulta de extrañar, por tanto, que pasados los tiempos la historia haya dado un pequeño vuelco, y que fuera Pablo Iglesias el tentado por la serpiente (Yolanda Diaz) haciendo comer la manzana a la gran lideresa Irene Montero, que a lo mejor ese día había llegado a casa, según su deseo, sola y borracha.
Por tal acontecer, Yolanda, traidora a toneladas, en lugar de potenciar Podemos, montó Sumar, razón por la cual dice de ella Montero, que es “el error más grande que hemos cometido” y que “multiplicó la agresividad de los golpes hacia las podemitas, los podemitos y les podemites, poniéndose del lado del PSOE, y aprovechando para intentar herir de muerte a Podemos”
¡Qué cosas!, el mundo se encuentra lleno de serpientes de lo más venenosas con canto de sirenas. Una de esas sirenitas de mirada fría y lomo presuntamente recubierto de escamas es Ione Belarra, asegurando sin rubor que “Irene Montero es la mejor persona para liderar un proyecto de paz en las elecciones generales" ya que al parecer ella y solo ella es capaz de “pararle los pies a Donald Trump”
“Ponte a fabricar una candidatura que sepulte a Yolanda Díaz ya mismo”. “Sé que te pido mucho”, pero… le dice Belarra a Montero, presuntamente también, a instancias de Pablo Iglesias.
Dios les cría y ellos se juntan y seguramente en sus cabezas, quizás perjudicadas por las radiaciones solares, se ven como una gran muralla temible contra los Estados Unidos. Los antaño propietarios de rastas y de piojos y ahora de grandes casas y vestidos de Loewe por lo menos, harán tambalear el muro, no de las lamentaciones, sino de los aranceles de Donald, el gran cheriff de las estepas económicas.
En ello, en lo de la gran muralla se encuentra así mismo Número Uno, que anda por Vietnam y China como si no hubiera un mañana, guiado por su mentor Zapatero, para hacer olvidar sus aledañas corrupciones y convertirse en otro “parador de pies” del arancelamiento. Y eso da mucho miedo porque capaz es con su habitual torpeza, pretensiones enfermizas de mando, hechuras de dictador y cables sueltos mentales, de convertir el viejo continente en un enorme “todo a cien”.
Abundan las serpientes, abunda el veneno y el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, critica el acercamiento de Sanchez&Zapatero a Pekín. “es como cortarse el cuello”.
¡Pero no, número Uno no es un pollo sin cabeza, le defiende Xi Jinping secretario general del Comité Central del Partido Comunista de China y presidente de la República Popular China!
Es que los comunistas, incluida doña Yolanda le adoran, y él a ellos.
Por tanto, a lo mejor Pedro Sánchez el bellísimo “corredor de Paiporta”, pasa a la historia no como el desenterrador del dictador Franco, sino como el realizador de ofrendas florales al dictador comunista Ho Chi Minh, que según los historiadores pudo ejecutar hasta cien mil personas durante su régimen.
¡Qué ecuánime! Cuánto sentido común tiene este hombretón, ton, ton, ton.
Eso sí, sin ton ni son, ni presunción de inocencia que diría la otra Montero.