Madrid Calle 30 será 100% municipal desde el 1 de enero y permitirá ahorrar más de 1.000 millones en 15 años
El Ayuntamiento culmina la compra del socio privado y asume el control total de la M-30 con un nuevo modelo de gestión más eficiente y sostenible
A partir de este 1 de enero, la empresa Madrid Calle 30, responsable de la gestión, conservación y explotación de la M-30, pasará a ser de titularidad íntegramente municipal. El Ayuntamiento culmina así el proceso de cambio de modelo iniciado esta legislatura con la adquisición de las acciones del socio privado, formalizada ante notario la pasada semana.
La delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García, ha anunciado que este movimiento permitirá un ahorro superior a los 1.000 millones de euros en los próximos 15 años, al eliminar sobrecostes derivados del modelo mixto anterior y apostar por una gestión directa más eficiente.
Cinco nuevos contratos para una nueva etapa
De forma paralela a la municipalización, el Consistorio ha tramitado cinco nuevos contratos de mantenimiento y explotación, que entran en vigor este mismo 1 de enero y sustituyen al anterior marco contractual, vigente hasta el 31 de diciembre.
Estos contratos garantizan el mantenimiento integral de una de las infraestructuras viarias más complejas de Europa, que incluye túneles, enlaces, sistemas de seguridad, señalización y control de tráfico en un eje por el que circulan diariamente cientos de miles de vehículos.
Más eficiencia y continuidad del servicio
Según ha explicado García, el nuevo modelo es “una opción más eficiente y sostenible para el Ayuntamiento” y permitirá planificar a largo plazo la conservación de la M-30 sin depender de un socio privado.
La delegada ha subrayado además que el cambio se realiza sin afectar a la plantilla, asegurando que “los trabajadores continuarán vinculados a la gestión de Calle 30, como hasta ahora, para garantizar la continuidad y calidad del servicio”.
Un ahorro histórico para las arcas municipales
La recuperación del control total de Madrid Calle 30 supone un hito en la gestión de infraestructuras en la capital. El Consistorio estima que el nuevo esquema permitirá liberar más de 1.000 millones de euros en quince años, recursos que podrán destinarse a nuevas inversiones en movilidad, mantenimiento urbano y mejora del espacio público.
Con este paso, el Ayuntamiento de Madrid cierra definitivamente una etapa marcada por la colaboración público-privada y abre otra en la que la M-30 vuelve a ser, al cien por cien, de los madrileños.