Espinosa de los Monteros acusa al Ayuntamiento de “cobrar por coches que no podrán circular” y exige revisar el impuesto de circulación
Iván Espinosa de los Monteros critica que Madrid mantenga el impuesto de circulación para 300.000 coches sin etiqueta que no podrán circular desde 2026.
Iván Espinosa de los Monteros, ex portavoz de Vox en el Congreso y hoy dedicado de nuevo al sector privado, ha reabierto el debate sobre la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de Madrid al cuestionar que el Ayuntamiento mantenga el Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM) para los 300.000 madrileños con coches sin etiqueta que no podrán circular por la ciudad a partir del 1 de enero de 2026.
En un mensaje publicado en X, el exdirigente aseguró que el Consistorio “no puede cobrar el impuesto de circulación a los 300.000 madrileños que no podrán usar su coche”, calificando la situación como una contradicción entre la normativa ambiental y la fiscalidad municipal.
“Me imagino que al Ayuntamiento, que ha tenido la ocurrencia de fastidiar a 300.000 madrileños prohibiéndoles circular desde el 1 de enero, no se le ocurrirá cobrarles el impuesto de circulación, ¿verdad?”, ironizó.
Un agujero potencial de 45 millones de euros
Espinosa cifró en 45 millones de euros la recaudación que podría perder el Ayuntamiento si decidiera eximir del impuesto a estos vehículos vetados por la ZBE. Su cálculo parte de una media de 149 euros por coche, aunque las tarifas reales oscilan entre 20 y 224 euros según la potencia fiscal.
El exdiputado sostiene que la restricción “innecesaria” contradice las promesas electorales del PP, y anima al alcalde José Luis Martínez-Almeida a “rectificar” antes de que la medida entre en vigor plenamente en 2026, cuando comenzarán a imponerse sanciones de 200 euros por circular con vehículos sin etiqueta.
Así funciona realmente la ZBE de Madrid
Desde el 1 de enero de 2025, todo el municipio de Madrid es una Zona de Bajas Emisiones permanente. Los vehículos con clasificación ambiental A —los más antiguos y contaminantes— tienen prohibido circular, aunque durante 2025 existe un periodo de aviso para los residentes con coches sin etiqueta: las cámaras registran sus accesos, pero no se sanciona.
A partir del 1 de enero de 2026, las multas sí serán efectivas.
Un estudio de la entidad Dvuelta estima que más de 300.000 vehículos sin distintivo siguen matriculados en la capital, y sustituirlos costaría entre 6.000 y 9.000 millones de euros en total para las familias madrileñas.
¿Puede dejar de cobrarse el impuesto? La clave está en la ordenanza fiscal
El IVTM es un impuesto municipal obligatorio que grava la titularidad del vehículo, no su uso. Mientras el coche esté de alta en el registro municipal, el Ayuntamiento debe girar el recibo, incluso si el vehículo no puede circular por restricciones ambientales.
Jurídicamente, solo una reforma de la ordenanza fiscal permitiría crear una exención específica para los coches afectados por la ZBE. Expertos en fiscalidad llevan años reclamando una revisión del impuesto para vincularlo más al impacto ambiental y al uso real del vehículo.
Un debate que trasciende Madrid
La Ley de Cambio Climático obliga a todos los municipios de más de 50.000 habitantes a disponer de una ZBE estable, por lo que las restricciones en ciudades españolas seguirán aumentando. Madrid fue pionera con Madrid Central y después consolidó su propio modelo con Madrid 360.
Ante este contexto, la tensión entre políticas climáticas, fiscalidad municipal y economía doméstica promete intensificarse a medida que se acerque 2026.