Geopolítica en tensión: Ucrania, el rebrote yihadista y el giro conservador en Iberoamérica marcan el cierre de 2025
Negociaciones sobre Ucrania, terrorismo yihadista reforzado por la IA y cambios políticos en Chile y España redefinen el escenario geopolítico global
El escenario internacional vive un momento de inflexión marcado por tres grandes vectores que se cruzan de forma inquietante: el avance de una posible negociación para la guerra de Ucrania, el regreso del yihadismo global con nuevas capacidades tecnológicas y la reconfiguración política en Iberoamérica y España, donde la batalla cultural se libra contra los marcos ideológicos dominantes de las élites mediáticas y políticas.
En el centro de este contexto se sitúa la victoria electoral de José Antonio Kast en Chile, el endurecimiento del enfoque de Estados Unidos frente al narco-terrorismo latinoamericano y la erosión institucional del Gobierno español, cada vez más cuestionado en el exterior.
Chile rompe el relato y consolida un giro conservador
La victoria de José Antonio Kast ha desafiado el relato dominante que asocia automáticamente a la derecha firme con el extremismo. Su discurso de victoria, de tono institucional y orientado a la estabilidad económica y la gobernabilidad, ha contrastado con las advertencias apocalípticas de buena parte de la prensa internacional.
Más allá del resultado electoral, el mensaje político es claro: una parte creciente del electorado latinoamericano rechaza el populismo, la inseguridad y la deriva económica de los últimos años. Chile se suma así al eje emergente junto a Argentina, donde el liberalismo económico y el orden institucional vuelven a ocupar el centro del debate.
Negociaciones sobre Ucrania: realismo con líneas rojas
En Europa, la atención se concentra en las negociaciones impulsadas por Washington y Berlín para explorar un marco de seguridad para Ucrania. La implicación directa de enviados estadounidenses y la búsqueda de garantías de seguridad similares a la OTAN reflejan un giro hacia el realismo estratégico.
Sin embargo, el riesgo de un mal acuerdo que legitime la agresión territorial rusa sigue presente. Analistas advierten de que cualquier concesión excesiva a Moscú tendría un impacto directo en el equilibrio global y sería observada con atención por China, especialmente en relación con Taiwán.
El yihadismo reaparece con nuevas herramientas
El atentado de Bondi, en Australia, ha vuelto a situar al terrorismo yihadista en el centro de la agenda de seguridad. La confirmación de vínculos con redes del Estado Islámico y el uso creciente de inteligencia artificial para propaganda, radicalización y desinformación evidencian que la amenaza no ha desaparecido, sino que se ha transformado.
Expertos alertan de que el uso de IA generativa por grupos terroristas supone un salto cualitativo que exige respuestas firmes y coordinadas, tanto en el ámbito tecnológico como en el político y comunicativo, evitando eufemismos que diluyan la gravedad del fenómeno.
Estados Unidos endurece su respuesta al narco-terrorismo
En América Latina, la Administración estadounidense ha intensificado su ofensiva contra las redes de narcotráfico vinculadas a Venezuela y Colombia, tratándolas como amenazas estratégicas y terroristas. Esta política supone un cambio respecto a años de ambigüedad y apunta directamente al entramado que sostiene al régimen de Nicolás Maduro.
Mientras tanto, parte de la prensa occidental mantiene un enfoque crítico con estas operaciones, dedicando menos atención a las violaciones de derechos humanos y al carácter mafioso del chavismo, una contradicción cada vez más señalada por analistas internacionales.
España y la erosión institucional
En el ámbito interno europeo, España aparece cada vez con más frecuencia en la prensa internacional como ejemplo de deterioro institucional. Los escándalos que rodean al Gobierno de Pedro Sánchez y la percepción de uso partidista de la Administración, incluida la carrera diplomática, han dañado la credibilidad exterior del país.
La permanencia de altos cargos cuestionados y la falta de dimisiones contrastan con los estándares de otras democracias europeas y alimentan una creciente desafección social y política.
Un final de año marcado por la incertidumbre
El cierre de 2025 confirma que la inocencia estratégica de Occidente ha terminado. El resurgir del terrorismo, la presión de potencias revisionistas y los cambios políticos en Iberoamérica configuran un escenario donde la seguridad, la soberanía y la defensa del Estado de derecho vuelven a ocupar un lugar central.
La geopolítica entra así en una nueva fase, más dura y menos ideológica, en la que las decisiones adoptadas en los próximos meses tendrán consecuencias duraderas para el equilibrio internacional.