Argentina

"El milagro argentino": Milei reduce la inflación casi un 80 % en un año y cosecha elogios internacionales

Javier Milei

La inflación en Argentina cayó de un 53,6 % a un 11,1 % en los primeros cuatro meses del año. Javier Milei, protagonista de un giro histórico en política económica

La economía argentina vive un momento inédito que muchos ya califican de “milagro antiinflacionario”. A poco más de un año del inicio de la presidencia de Javier Milei, los datos oficiales muestran una reducción histórica de la inflación: entre enero y abril de 2025, los precios aumentaron un 11,1 %, frente al 53,6 % registrado en el mismo periodo de 2024. Esto representa una caída del 79 % en el ritmo inflacionario, un logro que ha desatado tanto aplausos como análisis sobre sus causas y sostenibilidad.

Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), la desaceleración se refleja en todos los componentes del IPC. El rubro transporte, por ejemplo, ha pasado de un aumento del 67,2 % al 6,3 %; vivienda, agua, electricidad y gas, de un 83,1 % a un 12,5 %; y equipamiento del hogar, de un 44,1 % a solo un 5,0 %. Otros sectores sensibles, como salud, educación y alimentación, también han registrado caídas de dos dígitos en el ritmo de aumento de precios.

Milei, el protagonista

El artífice de este giro es, sin duda, Javier Milei, presidente de la Nación desde diciembre de 2023. El mandatario ha centrado su gestión en una serie de reformas económicas radicales, entre ellas:

  • Liberalización de los precios, eliminando controles estatales.

  • Devaluación inicial del peso, seguida de una política monetaria estricta.

  • Recorte drástico del gasto público, incluyendo subsidios y empleo estatal.

  • Eliminación de numerosos organismos públicos, como parte de su “motosierra”.

Estas medidas han tenido un impacto inmediato: en apenas 16 meses, Argentina ha bajado su inflación interanual desde el 211 % hasta el 47 %, y ha logrado contener el aumento de precios mensuales, estabilizando las expectativas económicas.

Reconocimiento internacional

El “milagro argentino” ha comenzado a recibir atención y elogios en el exterior. Este mismo jueves, Milei ha clausurado el World Economic Forum de Madrid, donde ha sido galardonado con un premio especial por parte de la Escuela de Salamanca, que lo reconoce como el “mejor economista liberal del año 2025”. El presidente argentino ha aprovechado su intervención para reivindicar el éxito de su programa y asegurar que la economía seguirá creciendo, tras anotar un aumento del PIB del 2,1 % en el último trimestre, mientras países europeos como España apenas alcanzaron un 0,6 %.

Comparación con Europa

El caso argentino contrasta fuertemente con el de economías desarrolladas. En la zona euro, por ejemplo, la inflación alcanzó un pico del 12 % en noviembre de 2022, y ha tardado tres años en reducirse por debajo del 2 %, con el Banco Central Europeo subiendo tipos desde julio de 2022. En cambio, Argentina ha conseguido una reducción mucho más rápida y drástica, con un enfoque diametralmente opuesto: más mercado, menos intervención.

Críticas y desafíos pendientes

Pese al entusiasmo de sus seguidores, la gestión de Milei no está exenta de críticas. Sectores de la oposición y organizaciones sociales alertan sobre los costos sociales de los ajustes: aumento de la pobreza, caída del poder adquisitivo de ciertos sectores, y conflictividad laboral en alza. Además, economistas advierten que la estabilidad lograda podría ser frágil si no se logra una consolidación fiscal sostenible y un marco legal robusto para futuras reformas estructurales.

Un fenómeno que marcará época

Sea por convicción o por necesidad, el experimento de Milei ya se ha convertido en caso de estudio global. Su combinación de disciplina fiscal, ortodoxia monetaria y liberalismo radical ha logrado, al menos hasta ahora, lo que parecía impensable en una economía tradicionalmente golpeada por la inflación: controlar los precios sin recurrir a controles de precios ni congelamientos.

Para algunos, es el inicio de una nueva era. Para otros, una burbuja política y económica que aún debe pasar la prueba del tiempo. Pero lo cierto es que Argentina, hoy, ha dejado el infierno inflacionario para mirar con renovada esperanza hacia el futuro.