Caída en LF Endesa, cese de Pernas y dudas internas: la dirección deportiva del Estu, señalada
Movistar Estudiantes destituye a Antonio Pernas tras un inicio crítico en LF Endesa y confía en Olmo Gómez mientras mantiene buen rumbo en Eurocup Women
La derrota en Leganés fue la gota que colmó el vaso. Movistar Estudiantes ha decidido poner fin a la etapa de Antonio Pernas en el banquillo del primer equipo femenino, un movimiento forzado por la realidad de la Liga Femenina Endesa, donde las Women in Black son colistas con un balance de 1-9, el peor de la competición. La dirección del club anunció oficialmente el cambio, agradeciendo el trabajo del entrenador gallego y confirmando que Olmo Gómez, hasta ahora segundo técnico, asumirá el mando de manera inmediata.
El equipo vive una doble cara competitiva. Mientras en liga la dinámica ha sido alarmante, con partidos donde la irregularidad y la falta de continuidad en el rendimiento han marcado el camino, en Eurocup Women el panorama es radicalmente opuesto: el equipo ha rendido a gran nivel, clasificándose como primero de grupo y afrontando la ida de dieciseisavos el 10 u 11 de diciembre con expectativas altas. Una contradicción deportiva que evidencia que la plantilla tiene nivel para competir, aunque sin estabilidad ni un bloque consolidado para hacerlo semana a semana en España.
El análisis interno no puede obviar un dato contundente: ocho movimientos en plantilla desde verano, con cuatro altas y cuatro salidas, han impedido construir una estructura sólida. Las lesiones de Isa Latorre y Kristina Topuzovic, los ajustes constantes y una rotación que nunca terminó de asentarse condicionaron el trabajo desde pretemporada. La recién llegada de Paige Crozon, aún sin debutar, y la búsqueda activa de una referencia interior confirman que el proyecto no estaba cerrado, y la falta de continuidad competitiva puede haber pasado factura tanto o más que las decisiones tácticas del técnico cesado.
La pregunta inevitable es si Antonio Pernas ha sido realmente el único responsable del mal arranque. Su salida apunta también hacia la dirección deportiva, que deberá reflexionar sobre la planificación, la gestión de las incorporaciones y la construcción del grupo. Sin una base estable, cualquier proyecto pierde suelo, y el equipo lo ha sufrido jornada tras jornada con rotaciones cortas, dependencia exterior y dificultades para sostener ritmos altos.
Ahora, con Olmo Gómez tomando el timón, el club afronta una semana clave. Dirigirá al equipo frente a Sleza Wroclaw en Eurocup y contra CAB Estepona en liga, dos escenarios que podrían servir para medir el pulso de un vestuario necesitado de aire, identidad y resultados. El club no ha aclarado si Gómez será una solución provisional o un relevo de continuidad, pero el margen de maniobra es cada vez menor.
La misión es clara: reconstruir, competir y reaccionar antes de que todo se complique. Las Women in Black tienen talento, Europa lo demuestra, pero la liga exige regularidad y estabilidad, dos elementos que el nuevo cuerpo técnico deberá recuperar con urgencia.
El inicio fue duro. El reto ahora es no llegar tarde a la reacción.