El Palacio de El Capricho se convertirá en un museo que transportará al Madrid ilustrado de los siglos XVIII y XIX
El Ayuntamiento impulsa la apertura del histórico edificio, que se encuentra en la fase final de su rehabilitación
El Palacio de los Duques de Osuna, situado en El Capricho, está cada vez más cerca de abrir sus puertas al público como un nuevo espacio museístico en Madrid, dedicado a la historia, el arte y el pensamiento de los siglos XVIII y XIX. El Ayuntamiento ha aprobado la fabricación de los elementos museográficos permanentes del recinto con una inversión de 2,3 millones de euros, un paso decisivo para la conversión del palacio en un referente cultural del distrito de Barajas.
Un museo en honor a la duquesa de Osuna
Este proyecto rinde homenaje a la IX duquesa de Osuna, Josefa Pimentel Téllez Girón, una de las figuras más destacadas de la Ilustración en España y artífice del conjunto histórico de El Capricho. El futuro museo ofrecerá a los visitantes un recorrido por la historia de la quinta, las personalidades que la habitaron y los movimientos artísticos e intelectuales que influyeron en su diseño y desarrollo.
La apertura del palacio se inscribe dentro de la estrategia del Ayuntamiento para ampliar y diversificar la red de museos de la ciudad, especialmente aquellos centrados en la historia de Madrid. El espacio abordará la llegada a España de las corrientes artísticas e intelectuales ilustradas, la evolución de la nobleza en la transición del Antiguo Régimen a la sociedad liberal y la adopción del paisajismo en el diseño de jardines.
Una joya cultural en el corazón de El Capricho
El palacio, actualmente en la fase final de su segunda etapa de rehabilitación, se sumará a las numerosas propuestas artísticas y naturales que ofrece el parque de El Capricho, uno de los espacios verdes más singulares de la ciudad. Este jardín de estilo paisajista romántico, abierto al público los fines de semana, se convertirá en el entorno ideal para un museo que buscará fusionar arte, historia y naturaleza.
Desde la plaza de los Emperadores, creada por Pedro Alcántara, nieto de la duquesa de Osuna, hasta el Casino de Baile, al que se llegaba en barca por el río artificial del parque, El Capricho ya es un "museo" al aire libre. La futura apertura del palacio reforzará aún más su valor cultural y patrimonial, convirtiéndolo en un destino imprescindible para madrileños y visitantes.