Fronteras desdibujadas

Silos, territorio literario: escribir con el alma

Existen lugares que no solo se habitan, sino que se llevan prendidos a uno. Silos es uno de ellos. Más que un rincón de la geografía española es un territorio del espíritu, donde la palabra, el silencio y el canto han aprendido a convivir como antiguos hermanos. Allí donde la piedra reza y el eco del canto gregoriano acaricia los muros del tiempo, una treintena de escritores y artistas de distintas latitudes se han reunido para rendir tributo al Monasterio de Santo Domingo de Silos, y lo han hecho con lo que mejor saben ofrecer: la palabra hecha arte.

Silos: Territorio Literario, coordinado con esmero, dedicación y sabiduría por el escritor, pintor y poeta José Luis Marín Aranda, es mucho más que una antología. Es una ofrenda colectiva, un homenaje coral al monasterio benedictino que, desde sus raíces visigodas, ha sido faro de contemplación, sabiduría y creación. Esta obra, publicada por el Grupo Editorial Sial Pigmalión, se inscribe en la valiosa colección de “Territorios Literarios”, y suma su voz a la geografía emocional de los lugares que merecen ser leídos, sentidos y protegidos.

Treinta y cuatro autores provenientes de cuatro continentes —poetas, narradores, fotógrafos, investigadores— nos invitan a recorrer Silos desde múltiples miradas. Cada texto, cada imagen, cada evocación es una pieza de ese mosaico espiritual que nos revela no solo la historia del monasterio, sino también el temblor íntimo de quienes lo visitan o lo sueñan. Desde la llama mística que atraviesa las páginas hasta la ternura de un recuerdo infantil, la diversidad de estilos y enfoques es tan rica como la misma tradición monástica que inspira. 

En esta sinfonía de voces, destaca también la presencia del editor Basilio Rodríguez Cañada, responsable, coautor del libro y encargado del pórtico, quien es amigo personal del padre Bernardo García Pintado, a quien tantos autores dedican su participación. Y junto a él, la comunidad benedictina en pleno, liderada por el abad Lorenzo Maté como rostro visible de esa fidelidad que conjuga el ora et labora con la hospitalidad y el legado cultural.

Portada Silos: territorio literario

La dedicatoria del libro lo dice todo

Para Bernardo Recaredo García Pintado, en su nonagésimo cumpleaños, con gratitud, afecto y admiración. Para toda la comunidad benedictina de Silos, que acata y sigue la Regula Sancti Benedicti, que se resume en el lema pax y el tradicional ora et labora. Y para todos los amigos de Silos.”

El libro está bellamente ilustrado con imágenes del fondo documental de la abadía de Silos como por fotografías de Raquel Delgado López.

No se trata solo de recordar, sino de agradecer, de celebrar la vida monástica como semilla de literatura y de trascendencia.

Este volumen no solo reivindica el valor espiritual, artístico y literario del monasterio, sino que lo convierte en una categoría del alma. Porque Silos no es solo un lugar: es una forma de mirar el mundo. Es un susurro antiguo que se cuela en la voz de quien escribe y en el corazón de quien escucha.

Y no puedo cerrar esta nota sin enviar un abrazo entrañable al monje poeta Bernardo García Pintado, prueba viviente del influjo sereno y fecundo del monasterio como inspiración. Su palabra es bendita y llega necesaria e influyente, tejida con la paciencia de quien ora en silencio, compone poesía, toca el órgano y siempre tiene tiempo para escuchar y aconsejar a todos con esa alegría y energía vital que lo caracteriza. Él nos recuerda que la poesía también puede nacer de la piedra, del canto pausado, del claustro que no aísla, sino que revela. En él —y en cada uno de los monjes que habitan Silos— habita la certeza de que la espiritualidad y la belleza caminan de la mano, y que la literatura, en su forma más pura, brota cuando el alma está en paz.

Autores participantes y títulos de sus colaboraciones

  • María del Carmen Aranda – El ciprés colector de sueños
  • Marisabel Balderrama – Curandero de almas
  • Luisa Ballesteros Rosas – Silos de los poetas…
  • Justo Bolekia Boleká – Buscando las entrañas de madre
  • María Luisa Blanco Gómez – Turismo espiritual: ¿una experiencia religiosa?
  • María Pilar Cavero Montori – Alguien me abrazó en Silos
  • M.ª Ángeles Cantalapiedra – El alquimista de pasiones
  • M.ª Ángeles Castillo Núñez – El pan de la memoria, alimento del recuerdo y de la nostalgia
  • Cecilia Castro Lee – La llama de amor viva: el monasterio de Santo Domingo de Silos
  • María Antonia García de León Álvarez – Habitar los monasterios
  • Enrique García Álvarez – Breve glosa sobre el padre Bernardo
  • Bernardo García Pintado – En el corazón del claustro
  • Roberto Gil de Mares – Cánticos espirituales
  • Francisco Gutiérrez Carbajo – Las glosas de Silos en su contexto
  • Laura Hernández Muñoz – Silos, un encuentro con la luz
  • Jesús Herrero del Cura – Cuando las piedras te hablen
  • Inma Jiménez Jorquera – Mi alma en Silos
  • Pauline Le Roy – Poemas a Silos
  • José Luis López Amigo – El camino del perdón
  • José Luis Marín Aranda – Palabras del coordinador literario
  • (además) Dámaso Vargas, el monje que llegó de la guerra
  • Emeterio Martín Brogeras – Silos, territorio literario
  • Fabio Martínez – Boda en Santo Domingo de Silos
  • Daniel Migueláñez – Luz en piedra
  • José María Palomero Gil – La sombra
  • Pilar Pedraza Pérez del Castillo – Silos, en el triángulo del Arlanza
  • Ronnie Piérola Gómez – Santo Domingo de Silos
  • Basilio Rodríguez Cañada – Pórtico del editor
  • (además) El monje poeta
  • Nery Santos Gómez – Volver al Monasterio de Santo Domingo de Silos
  • Carlos Vásquez-Zawadzki – Si los aforismos sugieren…
  • Bella Clara Ventura – Silos a la vista y al corazón
  • P. Lorenzo Maté – Silos, ámbito literario
  • Gloria Nistal – No he podido verlo, pero mil voces me han hablado de él
  • Ridha Mami – Poemas escritos en Silos
  • María Socorro Mármol Brís – I. C. A.