Respirar a pleno pulmón
Los pulmones representan el órgano más extenso, más expuesto y menos protegido del cuerpo humano.
Pueden alcanzar una superficie de hasta 140 m², frente a los 2 m² de la piel. La pérdida de función pulmonar no solo afecta a la respiración, sino que tiene una repercusión inmediata en el resto del organismo: aumenta la inflamación y acelera el envejecimiento de otros órganos. Incluso se ha demostrado que adolescentes con baja capacidad pulmonar presentan mayor incidencia de enfermedades no respiratorias
Por ello los expertos advierten que el cuidado de la salud pulmonar debe comenzar en la infancia, mucho antes de la aparición de síntomas.
“Los médicos para explicar los pulmones usamos mucho el símil de un árbol donde podemos diferenciar dos partes: el tronco y las ramas, por un lado, y las hojas por otro”, explica la Dra. Lorena Comeche Casanova, jefa asociada del Servicio de Neumología del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid. “El tronco y las ramas son los tubos que conducen el aire: tráquea, bronquios, bronquiolos. La suma total de todas las ramas que tenemos en los pulmones alcanza unos 2000 kilómetros. Las hojas serían la zona en la que se produce el intercambio de oxígeno con la sangre, lo que llamamos alveolos. En un adulto la superficie media que los pulmones exponen al exterior y participa en este intercambio se encuentra entre 80 y 140 m2”.
Esta compleja y extensa maquinaria trabaja de forma continua, incluso cuando estamos en reposo: 24 horas al día, 7 días a la semana, 365 días al año: hinchándose y deshinchándose unas 20.000 veces al día, más de 6 millones de veces al año.
La capacidad pulmonar va creciendo de forma progresiva desde el nacimiento y alcanza su pico máximo alrededor de los 25 años, posteriormente se produce una estabilización de 5 años y entorno a los 30 años se inicia un envejecimiento natural de los pulmones que cursa con una reducción progresiva de su capacidad.
pulmonar, inicialmente muy lenta y posteriormente más acelerada, dando finalmente síntomas.
Al igual que existe una edad biológica distinta de la cronológica, los pulmones también tienen su “edad pulmonar”, que puede ser más joven o más envejecida que la del resto del cuerpo. Detectarla permite actuar antes de que aparezcan los síntomas y frenar ese envejecimiento acelerado.
Entre esos síntomas que a menudo se normalizan destacan: dificultad para respirar al subir escaleras, sensación de ahogo desde la infancia o fatiga durante el ejercicio.
Lungevity Formula es un suplemento para la salud respiratoria, diseñado para optimizar la función pulmonar, proteger frente al daño oxidativo y favorecer la inmunidad frente a infecciones,
pensado específicamente para mejorar la salud pulmonar y prevenir su deterioro.
En su fórmula destacan:
· Colágeno hidrolizado y ácido hialurónicoà para dar soporte estructural y regeneración de matriz extracelular, clave en reparación tisular tras inflamación pulmonar.
· N-acetilcisteína (NAC) → potente antioxidante y precursor del glutatión, usado clínicamente en EPOC, fibrosis pulmonar y daño oxidativo pulmonar
· Vitamina C → esencial para síntesis de colágeno y reparación epitelial
· Zinc → modulador de la inmunidad, mejora integridad del epitelio y cicatrización
· Vitamina D3 → modula la respuesta inmune y reduce infecciones respiratorias
· Proantocianidinas (uva) y Coenzima Q10 → reducen estrés oxidativo y protegen mitocondrias, esenciales en regeneración celular.
Las personas que podrían beneficiarse de ello engloban a: pacientes con asma (10% población), pacientes con EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructivo Crónica (12% de la población, de la que el 30% son fumadores), habitantes de ciudades grandes con excesiva contaminación, tabaquismo pasivo, consumidores de VAPERS, u otros, deportistas que someten a sus pulmones a un mayor desgaste, épocas de frio y calor más intenso, épocas de epidemias de infecciones, durante y después de una infección respiratoria, exposición a humos de incendios.
Enlace a compra: https://luxmetique.com/collections/luxmetique-med