Formación a profesores para detectar y prevenir conductas suicidas y autolesiones en adolescentes
Más de 30 docentes han recibido capacitación en salud mental infanto-juvenil, dentro de un plan autonómico para atajar este fenómeno desde los centros escolares
La Comunidad de Madrid ha puesto en marcha una iniciativa pionera para formar a docentes en la prevención del suicidio y las autolesiones entre adolescentes, como parte de un plan autonómico integral en el que participan todas las consejerías del Ejecutivo regional. En esta primera edición, más de 30 profesores han recibido formación específica sobre cómo identificar y actuar ante comportamientos de riesgo en sus alumnos.
Los talleres, de carácter teórico y práctico, han sido impartidos por profesionales sanitarios de hospitales públicos madrileños, como el Centro de Salud Mental de la Fundación Alcorcón, especializado en población infanto-juvenil. Esta unidad ha desarrollado la formación en 13 complejos educativos de Alcorcón y el sur de la región, con la colaboración directa de las áreas territoriales de Educación y los responsables de Salud Mental de la Consejería de Sanidad.
Durante ocho horas de formación intensiva, los docentes han aprendido a reconocer los factores fisiológicos y emocionales de la adolescencia, las posibles causas de autolesiones e ideaciones suicidas, y, sobre todo, las pautas de actuación inmediata ante la detección de estos comportamientos. Los contenidos han sido impartidos por equipos multidisciplinares formados por psiquiatras, psicólogos clínicos y terapeutas ocupacionales.
Además del análisis de casos y la explicación del marco clínico, el curso ha incluido el aprendizaje de herramientas prácticas de escucha activa, evaluación del riesgo, intervención directa y manejo de protocolos escolares, esenciales para evitar situaciones de peligro y canalizar a tiempo las necesidades de los estudiantes afectados.
La red de hospitales públicos de la región también refuerza este enfoque preventivo en salud mental infanto-juvenil desde sus centros. El Hospital Gregorio Marañón cuenta con un programa específico de psiquiatras y psicólogos que trabajan directamente en colegios e institutos; el Infanta Cristina, en Parla, realiza sesiones de orientación con tutores de ESO; y el Hospital del Tajo, en Aranjuez, forma a coordinadores escolares para reforzar la detección temprana.
Esta formación forma parte del Plan de Prevención del Suicidio de la Comunidad de Madrid, un proyecto interdepartamental impulsado ante el aumento de los trastornos de salud mental en población joven. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística, la incidencia de suicidio en menores de 15 años en la región es de 0,103 casos por cada 100.000 habitantes, una cifra notablemente inferior a la media nacional, que se sitúa en 0,183.
Con esta estrategia, la Comunidad de Madrid refuerza su compromiso con la salud mental de los menores y se posiciona como referente nacional en la detección precoz y el abordaje multidisciplinar de los riesgos psicoemocionales en los centros educativos.