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El Ayuntamiento avala un proyecto para construir oficinas en la histórica finca Huerta de Mena

Huerta de Mena, la finca de Los Almendros de Hortaleza, desde el aire. Foto de Planorámica
El proyecto, impulsado por las Madres Adoratrices y la promotora francesa Therus Investment, busca construir 36.000 metros cuadrados de oficinas, apartahoteles y espacios de 'coliving' en un terreno con profundo valor histórico y literario

La emblemática Huerta de Mena, una finca centenaria de Hortaleza con profundo valor histórico y literario, podría desaparecer si prospera el plan urbanístico aprobado inicialmente por el Ayuntamiento de Madrid. El proyecto, impulsado por las Madres Adoratrices y la promotora francesa Therus Investment, busca construir 36.000 metros cuadrados de oficinas, apartahoteles y espacios de 'coliving' en un terreno que fue punto de encuentro de la Generación del 27 y propiedad del dramaturgo Carlos Arniches.

Un enclave histórico en peligro

Ubicada entre las autopistas M-40 y M-11, Huerta de Mena, también conocida como la finca de Los Almendros, es uno de los últimos vestigios de las quintas históricas que rodeaban el antiguo pueblo de Hortaleza antes de su anexión a Madrid en 1950. Entre 1922 y 1927, bajo la propiedad de Carlos Arniches, la finca albergó tertulias de intelectuales y artistas como Rafael Alberti, Federico García Lorca y Luis Buñuel. Según investigaciones, fue incluso testigo del amor no correspondido de Alberti por Victoria Amado, inspirando versos de Sobre los ángeles.

A pesar de este legado, la finca carece de protección oficial. En 2022, una propuesta de Unidas Podemos para declararla Bien de Interés Patrimonial (BIP) fue rechazada en la Asamblea de Madrid por el Partido Popular y Vox.

El plan urbanístico y las denuncias vecinales

El Ayuntamiento de Madrid, liderado por José Luis Martínez-Almeida, admitió a trámite en octubre el plan parcial presentado por las Madres Adoratrices, propietarias de la finca desde hace décadas. El proyecto incluye no solo los terrenos de la Huerta de Mena, sino también parcelas municipales, con un coste estimado de 4 millones de euros en dinero público.

La plataforma vecinal Salvar Hortaleza, que ha recogido más de 5.000 firmas en defensa de la finca, califica la operación como un "pelotazo urbanístico" que sacrifica el patrimonio histórico y cultural de Madrid en una zona "ya saturada de oficinas y con problemas de movilidad".

“Esta operación borraría del mapa una quinta de más de 200 años, que en cualquier otro país estaría protegida como un espacio público”, denuncia la plataforma.

El papel del patrimonio histórico en la polémica

El informe técnico que acompaña el plan de urbanización, según Salvar Hortaleza, minimiza el valor patrimonial de la finca. Este informe está firmado por Miguel Ángel García Valero, actual subdirector general de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid, lo que ha generado sospechas sobre la imparcialidad del documento.

La asociación Madrid, Ciudadanía y Patrimonio presentó esta semana una nueva solicitud para declarar la finca como Bien de Interés Cultural (BIC). De ser aceptada, esta catalogación protegería la Huerta de Mena de cualquier desarrollo urbanístico.

Movilización ciudadana

Este domingo 1 de diciembre, la plataforma Salvar Hortaleza organiza un paseo vecinal por Huerta de Mena para recordar su historia. La marcha comenzará a las 11:00 en la estación de Metro de San Lorenzo y culminará con una asamblea en la sede de la Asociación Vecinal La Expansión de San Lorenzo.

Un espacio histórico versus desarrollo urbano

La urbanización de Huerta de Mena plantea el dilema recurrente entre preservar el patrimonio histórico y cultural frente a las demandas del desarrollo urbano. Mientras los vecinos y asociaciones culturales intentan salvar este rincón verde, la falta de protección oficial deja en el aire el futuro de un espacio que marcó la historia literaria y artística de España.

El destino de la Huerta de Mena está ahora en manos de las autoridades municipales y autonómicas, cuya decisión definirá si Madrid conserva este legado o lo sustituye por nuevas edificaciones.