Vox y la ultraderecha europea claman en Madrid por una 'revolución patriota' contra Bruselas y la inmigración
Abascal reúne a los líderes de la ultraderecha europea en un cónclave que busca fortalecer su influencia en la UE
Los principales líderes de la extrema derecha europea se han reunido este fin de semana en Madrid, en una cumbre del grupo Patriotas por Europa, con el líder de Vox, Santiago Abascal, como anfitrión. La reunión ha servido para definir su estrategia política en los próximos meses, con el objetivo de consolidarse como una alternativa al actual liderazgo de la Unión Europea, al que acusan de estar dirigido por las “élites de Bruselas” y de aplicar políticas que, según ellos, perjudican la soberanía de los Estados miembros.
Un cónclave con la élite del nacionalismo europeo
En el evento han participado figuras clave de la ultraderecha europea como:
- Marine Le Pen (Agrupación Nacional, Francia).
- Viktor Orbán (Primer ministro de Hungría y líder de Fidesz).
- Matteo Salvini (Viceprimer ministro de Italia y líder de la Liga).
- Geert Wilders (Partido por la Libertad, Países Bajos).
- Herbert Kickl (Partido de la Libertad de Austria, FPÖ).
- André Ventura (Chega, Portugal).
Todos ellos han coincidido en la necesidad de frenar las políticas migratorias y ambientales de la UE, fortalecer la identidad nacional y buscar una mayor colaboración con Donald Trump, a quien consideran una referencia en la política global.
“Hacer Europa grande otra vez”
El lema de la cumbre ha sido "Make Europe Great Again" (MEGA), inspirado en el eslogan de Trump. La reunión ha servido para fortalecer el discurso del grupo Patriotas, que se presenta como una oposición frontal a la política de Bruselas, criticando especialmente:
- La inmigración masiva, que describen como una "invasión" que pone en riesgo la identidad de las naciones europeas.
- Las políticas climáticas del Pacto Verde, a las que tildan de “experimentos ruinosos” que afectan la economía y la industria.
- La burocracia europea, que consideran una herramienta para imponer normas supranacionales que limitan la soberanía de los países.
Orbán y Le Pen: símbolos de la nueva estrategia
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ha insistido en que su país es la prueba de que el modelo de los Patriotas funciona, asegurando que en Hungría han logrado detener la inmigración ilegal, prohibir la propaganda de género en las escuelas y reforzar la cultura cristiana.
Por su parte, Marine Le Pen ha defendido que la victoria de Trump en EE.UU. marca el inicio de un cambio global y ha criticado la política económica de la UE, en especial la “obsesión” con las energías renovables y el decrecimiento económico.
Salvini carga contra Sánchez y Bruselas
El vicepresidente italiano, Matteo Salvini, ha aprovechado su intervención para criticar directamente al Gobierno español, afirmando:
“Bye, bye Pedro; bye bye Open Arms; ¡viva la libertad!”
Además, ha cargado contra la UE por su falta de apoyo a la industria europea, argumentando que las actuales políticas comunitarias perjudican a los trabajadores europeos y benefician a las multinacionales.
Vox, anfitrión y puente entre Europa y América
El papel de Santiago Abascal como anfitrión ha reforzado la posición de Vox dentro del movimiento ultraconservador europeo. Desde hace años, el partido ha trabajado en conectar la extrema derecha europea con el entorno de Trump, y esta cumbre ha sido un claro reflejo de esa estrategia.
Abascal ha defendido que Europa debe recuperar su soberanía nacional, oponiéndose a las políticas globalistas y a lo que considera una "élite progresista que debilita a las naciones". Además, ha insistido en la necesidad de forjar alianzas con líderes internacionales como Trump y Javier Milei, presidente de Argentina.
Un futuro incierto, pero con ambiciones claras
Patriotas por Europa se ha consolidado como la tercera fuerza política en la Eurocámara, con 86 eurodiputados y el objetivo de seguir ganando influencia en las elecciones de 2029. Sin embargo, todavía enfrenta desafíos internos, como la competencia con otros grupos de derecha radical como los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), liderados por Giorgia Meloni, quien no ha asistido a la cumbre.
Con esta reunión en Madrid, la ultraderecha europea ha dejado claro que busca una ofensiva política de gran alcance para transformar la UE en una unión de naciones soberanas, con un fuerte componente nacionalista, antiinmigración y contrario a las políticas climáticas de Bruselas.
El escenario político en Europa sigue cambiando y, con el regreso de Trump a la Casa Blanca, los Patriotas ven una oportunidad para reforzar su influencia y desafiar el modelo actual de la UE.