Incendio en el sector 6 de Cañada Real obliga a desalojos y moviliza a 14 dotaciones de Bomberos
El fuego, ya controlado, ha afectado a varias chabolas y una nave; dos personas han sido atendidas por crisis de ansiedad
Un incendio declarado en el sector 6 de la Cañada Real ha obligado a activar el Procedimiento de Incidentes Complejos (PIC) por parte del Ayuntamiento de Madrid, movilizando a numerosos efectivos de emergencias. El fuego, ya controlado, ha afectado a varias infraviviendas y a una nave industrial, y ha provocado el desalojo preventivo de la zona más próxima a los focos.
En total, 14 dotaciones de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid han trabajado intensamente para sofocar las llamas, que se habían extendido por varios puntos del asentamiento. La intervención ha sido reforzada por la Unidad de Apoyo Aéreo de Policía Municipal, que ha utilizado drones para proporcionar imágenes aéreas y facilitar así las labores de extinción.
Aunque no se han producido heridos de gravedad, el Samur-Protección Civil ha tenido que atender a dos personas por crisis de ansiedad. Por precaución, la Policía Municipal ha procedido al desalojo de las chabolas más próximas a los focos del incendio, garantizando la seguridad de los residentes ante el riesgo de propagación.
Ante la complejidad del operativo, el Ayuntamiento ha activado el Procedimiento de Incidentes Complejos (PIC), un protocolo que permite la coordinación simultánea de todos los servicios municipales implicados —Bomberos, Policía Municipal y Samur-PC— para actuar de forma eficiente en emergencias de gran escala.
Una vez controlado el incendio, los Bomberos permanecen en la zona realizando tareas de revisión y refresco de los puntos aún calientes, con el objetivo de evitar posibles rebrotes. Las autoridades municipales mantendrán el seguimiento de la situación durante las próximas horas.
Este nuevo episodio vuelve a poner de relieve la vulnerabilidad de las condiciones de vida en la Cañada Real, un asentamiento marcado por la precariedad, la falta de infraestructuras y el riesgo constante de incendios en zonas de infravivienda.