Ciudades del futuro

Ciudades del futuro: el reto de la inclusión ante un 70% de población urbana en 2050

ciudades inclusivas
El crecimiento urbano exige modelos de planificación más inclusivos, con perspectiva de género y adaptados a niños y mayores para garantizar ciudades seguras y equitativas.

En un mundo donde el 56% de la población ya vive en ciudades y se espera que esta cifra alcance el 70% en 2050, el urbanismo enfrenta uno de sus mayores desafíos: diseñar entornos seguros, accesibles e inclusivos para todos los sectores de la sociedad.

Ante este panorama, Arup, firma global de desarrollo sostenible, ha identificado innovaciones clave en diseño urbano para garantizar que el crecimiento de las ciudades priorice el bienestar social y responda a las necesidades específicas de mujeres, niños, adultos mayores y personas en situación de vulnerabilidad.

Ciudades más seguras para las mujeres: la necesidad de una perspectiva de género

Las mujeres se enfrentan a barreras estructurales en las ciudades actuales, desde la falta de seguridad hasta la escasez de servicios adaptados a sus necesidades. Para corregir estas desigualdades, Arup propone integrar la perspectiva de género en la planificación urbana mediante las siguientes medidas:

  • Mejorar la iluminación y seguridad en espacios públicos para evitar zonas de riesgo, especialmente durante la noche. Estudios han demostrado que una iluminación adecuada reduce la sensación de inseguridad.
  • Diseñar sistemas de transporte adaptados a los patrones de movilidad femenina, como el viaje encadenado, que combina trabajo y tareas del hogar.
  • Incluir infraestructuras públicas accesibles, como baños, zonas de lactancia y cambiadores para bebés.
  • Crear centros de ayuda en zonas de tránsito, donde las mujeres puedan acudir en caso de sentirse inseguras.

Ciudades adaptadas para niños y mayores

Actualmente, 1.000 millones de niños viven en entornos urbanos, mientras que la población mayor de 60 años se duplicará en 2050, alcanzando 2.100 millones de personas. Sin embargo, muchas ciudades aún no están preparadas para atender sus necesidades.

Para garantizar la calidad de vida de estos grupos, Arup recomienda:

  • Rutas seguras hacia las escuelas, con caminos peatonales y carriles bici bien señalizados.
  • Parques y zonas verdes accesibles, con áreas de descanso y espacios de juego inclusivos.
  • Reducción de la contaminación del aire, especialmente cerca de escuelas y áreas residenciales.
  • Acceso equitativo a centros de salud y servicios médicos.
  • Transporte público adaptado, con vehículos accesibles y paradas cercanas a residencias y centros médicos.

Ciudades resilientes e inclusivas: el urbanismo del siglo XXI

Para Gabriela Bachiller, Senior Urban Planner de Arup en España, el diseño urbano debe responder a las diversas necesidades de la población, desde mujeres y niños hasta personas mayores.

"Nuestro objetivo no es solo crear entornos urbanos funcionales, sino convertir las ciudades en espacios que mejoren la calidad de vida y fortalezcan el sentido de comunidad", afirma.

A medida que las ciudades crecen, el reto no es únicamente gestionar el espacio sino garantizar que este sea seguro, equitativo y accesible para todos. La inclusión en el diseño urbano será clave para definir el bienestar de las generaciones futuras en el entorno urbano del siglo XXI.