Pandemia

Cinta Pascual y la crisis de las residencias: De denunciar el abandono en pandemia a su salida de la patronal en pleno conflicto político

Cinta Pascual en el congreso

La presidenta del Círculo Empresarial de Atención a Personas, Cinta Pascual, denunció en su día el abandono del sistema de residencias durante la pandemia y la falta de apoyo por parte de las administraciones. Ahora, en plena guerra política en Madrid por las muertes en residencias y las querellas anunciadas por el Gobierno de Ayuso, su figura vuelve a ser clave en el debate, aunque ha decidido apartarse de la primera línea de la patronal de cuidados

Cinta Pascual, quien fuera una de las voces más críticas durante la pandemia respecto al colapso del sistema de atención a mayores en residencias, compareció en su momento en el Congreso de los Diputados, donde hizo una dura intervención denunciando que “algo falló” en la gestión de la crisis sanitaria y reclamando transparencia en las decisiones que se tomaron.

Ahora, en un contexto donde Madrid se encuentra en plena batalla política y judicial por la gestión de la pandemia en residencias, con acusaciones cruzadas entre el Gobierno de Isabel Díaz Ayuso y la oposición, el discurso de Pascual vuelve a resonar. La Comunidad de Madrid ha anunciado una querella contra la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Reyes Maroto, por sus declaraciones sobre los 7.291 fallecidos en residencias, mientras que el PP ha roto relaciones con el partido en el consistorio madrileño.

Sin embargo, Pascual ha dado un paso al costado. Ha anunciado su dimisión como presidenta del Círculo Empresarial de Atención a Personas (CEAPs), el mayor lobby del sector de la dependencia en España. Su salida se produce en un momento de tensiones internas dentro del sector, con otras patronales buscando desplazar su liderazgo.

Las denuncias de Pascual: abandono y decisiones unilaterales

Durante su intervención en el Congreso en plena pandemia, Pascual relató el “infierno” que vivió el sector de residencias y denunció que se tomaron decisiones sin consultar a los profesionales. Entre sus críticas más duras, afirmó que:

  • Se negó el acceso a hospitales a muchas personas mayores en residencias, y las decisiones se tomaron sin preguntar a familiares, sanitarios ni profesionales del sector.
  • No hubo una comunicación directa con el sector ni con las propias residencias, que se quedaron “solas” en la peor crisis sanitaria de la historia reciente.
  • El material de protección llegó tarde y de manera insuficiente, lo que obligó a muchos trabajadores a improvisar con bolsas de basura.
  • Las residencias fueron tratadas como “centros de confinamiento” en lugar de como centros sanitarios.

Pascual no se posicionó explícitamente en contra de ningún gobierno autonómico en concreto, pero sí dejó claro que la gestión de la crisis fue un fracaso generalizado.

Madrid y la batalla política por las residencias

Mientras Pascual denunciaba la falta de atención a los mayores en el Congreso, en Madrid la situación se enconaba. El Gobierno de Ayuso ha sido acusado en reiteradas ocasiones de haber aplicado protocolos que impidieron la derivación de ancianos de residencias a hospitales durante el pico de la pandemia en 2020. Estos protocolos han sido objeto de investigaciones, debates parlamentarios y documentales como 7.291, que han reabierto el debate sobre la gestión de la crisis.

Las recientes declaraciones de Reyes Maroto asegurando que “fueron 7.291 las víctimas o personas mayores asesinadas” han llevado al Gobierno de Madrid a tomar medidas drásticas, con una querella contra la portavoz del PSOE y la ruptura de relaciones con el grupo socialista en el Ayuntamiento.

Por su parte, Ayuso ha insistido en que el relato sobre lo ocurrido en las residencias está manipulado y que las decisiones se tomaron en un contexto de emergencia sanitaria global, sin margen de actuación. El PP madrileño acusa al PSOE de utilizar a las víctimas con fines políticos, mientras que desde la oposición insisten en que se debe esclarecer la verdad y asumir responsabilidades.

Pascual deja la patronal en plena reorganización del sector

En este contexto de enfrentamientos políticos y revisión de responsabilidades, Cinta Pascual ha decidido apartarse de la presidencia de CEAPs, la principal patronal del sector. Según fuentes cercanas, Pascual se centrará en la Asociación Catalana de Recursos Asistenciales (Acra), que también preside, alejándose del foco nacional.

Su salida no ha estado exenta de polémica. Otras patronales del sector, como la Federación Empresarial de Dependencia (Fed) y la Asociación de Empresas de Servicios para la Dependencia (Aeste), han aprovechado la coyuntura para reorganizarse y tratar de restar influencia a CEAPs.

A pesar de su retirada de la primera línea, el legado de Pascual sigue presente en el debate. Sus críticas a la falta de planificación y a la improvisación en la gestión de la pandemia siguen vigentes en un momento en el que las consecuencias de aquellas decisiones siguen resonando en la política madrileña.

El futuro de la atención a mayores

La guerra política por la gestión de la pandemia en Madrid ha eclipsado la discusión sobre cómo mejorar el sistema de atención a personas mayores para evitar que una crisis similar vuelva a ocurrir. Pascual, antes de dejar la patronal, insistió en la necesidad de:

  • Garantizar el acceso de los mayores a hospitales en cualquier circunstancia.
  • Mejorar la financiación de las residencias y las condiciones laborales de los trabajadores.
  • Asegurar la coordinación entre el sistema sanitario y el sector de la dependencia.
  • Garantizar transparencia en la toma de decisiones en futuras crisis sanitarias.

Mientras tanto, Madrid sigue en pie de guerra política, con el foco puesto en los tribunales y en la disputa por la narrativa de lo ocurrido en las residencias. En este tablero, Pascual, que en su día denunció el abandono del sector, ha optado por un silencioso adiós a la primera línea empresarial, pero sus palabras siguen pesando en el debate público.