El Ayuntamiento entrega las primeras viviendas de alquiler asequible en derecho de superficie
La promoción de Villaverde estrena 125 pisos con rentas desde 663 euros y se convierte en el primer proyecto culminado de un plan municipal que prevé 2.134 viviendas en 25 parcelas cedidas a promotores privados durante 45 años.
La lucha contra el encarecimiento del alquiler en Madrid da hoy un paso tangible. El Ayuntamiento ha entregado las llaves de las primeras viviendas construidas en derecho de superficie, una fórmula que busca ampliar la oferta de alquiler asequible sin desprenderse de suelo público.
La promoción inaugurada, desarrollada por Vía Ágora en el ámbito Parque Central de Ingenieros, en Villaverde, cuenta con 125 pisos con precios desde 663 euros mensuales, muy por debajo de los precios medios del distrito, que en junio de 2025 rondaban los 13,1 €/m², según datos de Idealista.
“Hoy vemos materializado el esfuerzo que estamos realizando a través de Alberto, quien ha podido acceder a esta casa con un alquiler asequible, que supone menos del 25 % de su renta mensual”, ha destacado Borja Carabante, delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, durante la entrega de llaves al primer inquilino.
Viviendas con servicios de calidad
Las viviendas, que han recibido más de 300 solicitudes, incluyen cocinas equipadas, trastero, plaza de garaje, zonas comunes, cuarto para bicicletas, gimnasio, sistema de aerotermia y buzones inteligentes, características poco habituales en promociones de alquiler asequible.
Se trata del primer proyecto finalizado de los que se están levantando sobre las 25 parcelas cedidas por el Ayuntamiento, que sumarán un total de 2.134 viviendas de alquiler asequible. Culmia, Pecsa Avintia y Vía Ágora son las tres promotoras encargadas de estas promociones, fruto de la colaboración público-privada.
Una estrategia para aliviar el mercado del alquiler
El modelo empleado por el Consistorio madrileño consiste en ceder durante 45 años los derechos de superficie sobre parcelas municipales calificadas como suelo para vivienda libre. Durante ese plazo, las promotoras gestionan los inmuebles en régimen de alquiler asequible. Al finalizar, los edificios pasan a engrosar el parque público de vivienda del Ayuntamiento.
Según Carabante, este plan está pensado para “facilitar el acceso a la vivienda a un gran porcentaje de población de clase media afectada por la subida del mercado de los alquileres, pero que no puede acceder a un piso de protección pública”.
Y es que, en la capital, los datos revelan un mercado inmobiliario bajo fuerte presión. El Banco de España estima que el esfuerzo financiero medio para pagar un alquiler en Madrid alcanzó el 36,9 % de los ingresos familiares en 2023, mientras que estudios de Idealista elevan esa cifra al 41 % en 2024, frente al umbral del 30 % considerado aconsejable por organismos internacionales.
Para optar a estas nuevas viviendas, los ingresos anuales de los inquilinos no pueden superar 5,75 veces el IPREM. Esto supone, por ejemplo, un máximo de 60.375 euros anuales para una familia de hasta dos miembros o 69.000 euros para núcleos familiares de seis o más personas. Los solicitantes tampoco pueden ser propietarios de otra vivienda.
Más de 2.700 viviendas asequibles en camino
Además de estas 2.134 viviendas, el Ayuntamiento de Madrid impulsa otro plan para la venta social de suelo a precio reducido, condicionado a mantener rentas asequibles durante 15 años. A través de esta vía, se prevé levantar 640 viviendas más en distritos como Arganzuela, Chamartín, Carabanchel o Villaverde.
En total, gracias a estos dos mecanismos de colaboración público-privada, la ciudad alcanzará 2.774 nuevas viviendas en alquiler asequible en los próximos años, reforzando un parque que busca ofrecer alternativas a sectores que se encuentran en la franja intermedia entre la vivienda libre y la vivienda protegida.
“La hoja de ruta es clara: aumentar la oferta, dar seguridad jurídica, agilizar trámites y reforzar la colaboración público-privada. Solo así podremos ofrecer alternativas reales a los madrileños”, ha señalado Álvaro González, delegado de Políticas de Vivienda.
Con estas nuevas promociones, el Ayuntamiento de Madrid pretende aliviar la presión del mercado, asegurar rentas sostenibles y evitar que miles de ciudadanos queden expulsados del centro urbano por la subida constante de los alquileres. Un reto urgente en una ciudad donde la vivienda se ha convertido en uno de los principales desafíos sociales y económicos.