Declaraciones

Puigdemont reivindica la independencia y avisa que el voto de Junts “no se da por descontado”

Carles Puigdemont en rueda de prensa - Foto de Junts

En el acto por el quinto aniversario del partido, el expresidente catalán lanza un mensaje directo a los partidos estatales: “Nuestro voto hay que ganárselo con el método Junts”

En un acto con fuerte carga simbólica celebrado en Prats de Molló (Francia), el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha reaparecido este domingo ante más de un millar de simpatizantes para conmemorar el quinto aniversario de la fundación de Junts per Catalunya. Desde este enclave histórico del exilio catalán, Puigdemont ha dejado claro que el voto de Junts no está garantizado a ningún partido estatal, lanzando un mensaje inequívoco a los que confían en su apoyo sin condiciones.

Acompañado del secretario general del partido, Jordi Turull, y de la secretaria de Organización, Judith Toronjo, el líder de Junts aprovechó la ocasión para reafirmar su compromiso con el independentismo catalán, señalando que su formación solo apoyará aquello que “beneficie a los catalanes y permita avanzar hacia la independencia”.

“Nuestro voto no se puede dar por descontado, nunca ni en ningún sitio. Nuestro voto hay que ganárselo con el método Junts”, afirmó Puigdemont, en referencia a una forma de actuar basada en criterios soberanistas y no en intereses partidistas o pactos previos. En este sentido, rememoró una frase del exalcalde de Barcelona Xavier Trias, diciendo: “Ya me entendéis”, aludiendo al célebre "que os zurzan" que pronunció Trias tras quedar excluido del gobierno municipal.

Puigdemont también arremetió contra los extremos ideológicos y el populismo, afirmando que Junts “incomoda a los que se sitúan en los extremos, a los que practican el populismo y a los que llegan a las negociaciones con el guion escrito”. Reivindicó que el partido no se esconde tras pancartas ni eslóganes simplistas, y que está dispuesto a asumir debates incómodos si ello responde a su causa.

La elección de Prats de Molló como escenario del acto no es casual: fue el lugar donde Francesc Macià planeó en 1926 su intento de invasión de Cataluña para proclamar la República Catalana. En ese contexto, el líder independentista ha querido vincular el legado histórico del soberanismo con el presente, reivindicando la necesidad de seguir trabajando “por la libertad de Cataluña”.

En un momento político marcado por la fragilidad parlamentaria del Gobierno central y las negociaciones complejas para aprobar presupuestos y reformas clave, Junts se consolida como un actor imprescindible. El mensaje de Puigdemont deja claro que cualquier apoyo tendrá un precio político basado en avances concretos hacia la autodeterminación.

Con esta intervención, Puigdemont lanza un aviso a navegantes: Junts no es un socio previsible ni dócil, y su respaldo solo se ofrecerá a cambio de concesiones reales para Cataluña. Mientras tanto, el líder independentista continúa desde el exilio francés ejerciendo influencia decisiva en la política española.