Las terrazas del edificio Nouvel reabren como espacio expositivo en el Museo Reina Sofía
El Museo Reina Sofía ha reabierto las terrazas del edificio Nouvel, transformándolas en una nueva sala expositiva al aire libre que alberga tres esculturas de Jesús Rafael Soto, Martín Chirino y Edgar Negret, piezas nunca antes expuestas en el Museo. Bajo el título Un orden distinto. Geometría utópica y arte cinético en las terrazas de Nouvel, esta nueva configuración busca resaltar la importancia de la escultura geométrica de los años sesenta y setenta y su impacto en el espacio público y social de la época.
Un nuevo espacio expositivo en el Reina Sofía
El director del Museo Reina Sofía, Manuel Segade, ha presentado esta innovadora reordenación de la Colección, subrayando que la apertura de estas terrazas como sala expositiva responde a la necesidad de ofrecer nuevas lecturas sobre la escultura geométrica y el arte cinético. "La intervención permite explorar cómo estos lenguajes artísticos transformaron la relación entre el espectador y la obra, promoviendo la interacción y la participación", ha explicado Segade.
Las obras expuestas: Soto, Negret y Chirino
Las tres esculturas seleccionadas representan hitos clave en la historia de la escultura geométrica y cinética:
Jesús Rafael Soto - Penetrable (1982): Una de las series más icónicas del artista venezolano, basada en estructuras suspendidas de tubos de PVC que invitan al espectador a atravesarlas, difuminando los límites entre arte y espacio arquitectónico.
Edgar Negret - Vigilante rojo (1979): Obra del escultor colombiano basada en formas modulares ensambladas con tuercas y pernos visibles, destacando su enfoque industrial y su experimentación con la composición dinámica.
Martín Chirino - Mediterránea (10) (1971): Una escultura en acero inoxidable inspirada en el movimiento del mar Mediterráneo, con formas ondulantes y una estructura expansiva que dialoga con el entorno urbano.
Un nuevo enfoque en la Colección del Reina Sofía
La reapertura de las terrazas del edificio Nouvel forma parte del plan de reordenación de la Colección Permanente del Museo, un proceso que culminará en 2028 con el objetivo de fortalecer la narrativa expositiva y ofrecer un recorrido más cohesionado y revisable a lo largo del tiempo.
Esta nueva sala al aire libre no solo amplía las posibilidades de exhibición del Museo, sino que también refuerza su compromiso con la recuperación y puesta en valor de artistas esenciales en la historia del arte geométrico y cinético, conectando a los visitantes con una etapa crucial de la modernidad artística.
Con esta iniciativa, el Museo Reina Sofía se posiciona nuevamente a la vanguardia de la experimentación museográfica, ofreciendo una experiencia inmersiva que redefine la interacción entre arte, arquitectura y ciudad.