El Ayuntamiento confirma el cierre temporal de un hostal gestionado por CEAR en Puente de Vallecas
El Ayuntamiento investiga si el establecimiento turístico se utilizaba como centro de acogida de migrantes, actividad no contemplada en su licencia
El Ayuntamiento de Madrid ha confirmado el cierre temporal del hostal ubicado en Puente de Vallecas y gestionado por la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), al considerar que su uso podría estar incumpliendo la licencia de actividad. Según ha explicado el delegado de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, el establecimiento cuenta con una licencia de tipo turístico y no está autorizado para ejercer como centro de acogida para inmigrantes.
El delegado ha detallado que la Comunidad de Madrid realizará una inspección para determinar si en el interior del hostal residían personas migrantes, lo que supondría un uso indebido de la licencia otorgada. “Nos consta un cierre de actividad temporal”, ha afirmado Carabante, quien ha subrayado que la actividad hotelera debe ajustarse a lo estipulado legalmente y que no se puede operar “de manera encubierta” como centro de acogida.
Otro hostal bajo revisión
Durante una visita institucional a la torre de vigilancia contra incendios de la Casa de Campo, Carabante también ha informado de que el Ayuntamiento está verificando la situación de otro hostel del mismo titular, ubicado en la calle Baviera, antes de su apertura. “Estamos comprobando que la licencia se utilice exclusivamente para fines turísticos, como exige la normativa”, ha insistido.
El Ayuntamiento asegura que no puede haber convenios o contratos para la acogida de población migrante si la licencia concedida es de hostel. Esta actuación responde al compromiso del Consistorio de vigilar el cumplimiento normativo tras las denuncias vecinales que se han producido en las últimas semanas, motivadas por la presunta utilización de estos alojamientos como residencia de personas migrantes.
Contexto de tensión y protestas
La polémica en torno al uso de estos hostales se intensificó en junio, cuando el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, advirtió públicamente que se procedería al cierre de los establecimientos si no se utilizaban con fines turísticos. El propio alcalde manifestó entonces que “la legalidad debe cumplirse en todos los casos”, dejando claro que el Ayuntamiento actuaría si se detectaba un uso irregular.
En este contexto, algunos residentes de Puente de Vallecas han expresado su rechazo a la presencia de migrantes en alojamientos turísticos, alimentando un debate público en el que se cruzan preocupaciones vecinales, derechos de las personas refugiadas y el cumplimiento de las normativas municipales.
CEAR en el foco
La Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), organización sin ánimo de lucro dedicada a la defensa de los derechos de las personas refugiadas, gestiona varios recursos de acogida en distintas ciudades, en colaboración con las administraciones públicas. En este caso, la actividad concreta de los hostales y su adecuación a las licencias en vigor está siendo objeto de investigación tanto por parte del Ayuntamiento como de la Comunidad de Madrid.
Además, en el entorno de estos dispositivos, se han denunciado supuestos “cobros ilegales” a migrantes para obtener citas con sus trabajadores sociales, una situación que ha despertado nuevas alertas sobre la necesidad de supervisión y transparencia en los procesos de atención a personas en situación de vulnerabilidad.
Las inspecciones previstas determinarán si existen irregularidades y, en su caso, si deben adoptarse medidas adicionales para garantizar el cumplimiento de la legalidad vigente en materia de usos del suelo, licencias turísticas y atención a colectivos migrantes.