Juan Lobato dimite como líder del PSOE de Madrid
Juan Lobato, hasta ahora secretario general del PSOE de Madrid, presentó este miércoles su dimisión mediante una carta dirigida a la militancia, tan solo un día después de asegurar públicamente que no renunciaría. La renuncia llega en medio de la polémica generada por la filtración de unos correos relacionados con la pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, y las crecientes tensiones internas en el partido.
"Poner freno a la división en el partido"
En su carta, Lobato explicó que su decisión busca "frenar una situación de enfrentamiento y división grave" dentro del PSOE madrileño. "Mi objetivo siempre ha sido construir un proyecto ambicioso y con ilusión para Madrid, y así debe seguir siendo en el futuro", afirmó. Lobato también admitió diferencias con el enfoque político de la actual dirigencia del partido: "Mi forma de hacer política no es igual ni quizá en ocasiones compatible con la de la mayoría de la dirigencia actual de mi partido".
El exlíder socialista subrayó su compromiso con una política basada en el diálogo, el respeto y el interés general, criticando los métodos que, según él, buscan la "aniquilación del adversario o del que discrepa". "Para mí, la política es otra cosa", sentenció.
Polémica por los correos del caso Ayuso
La renuncia de Lobato se produce tras días de intensa controversia relacionada con la filtración de correos electrónicos enviados por el abogado de Alberto González Amador, pareja de Ayuso, a la Fiscalía. Según el periódico ABC, Lobato registró en una notaría mensajes de WhatsApp en los que Pilar Sánchez Acera, jefa de Gabinete del ministro Óscar López, le habría instado a usar esos correos contra Ayuso en la Asamblea de Madrid. Lobato aseguró que esta acción fue una medida para protegerse y demostrar que ni él ni el PSOE obtuvieron esos correos de manera ilícita.
Esta polémica desató críticas internas en el PSOE, especialmente desde sectores afines a Moncloa, que calificaron la actuación de Lobato como un error que había causado un daño innecesario al partido.
Críticas veladas al liderazgo de Pedro Sánchez
En su misiva, Lobato también lanzó críticas hacia la dirección nacional del PSOE y, en particular, hacia el liderazgo de Pedro Sánchez. "Yo no creo en la destrucción del adversario, en la aniquilación del que discrepa y del que piensa diferente", afirmó, dejando entrever su descontento con el manejo de la crisis por parte de la cúpula socialista.
Crisis interna en el PSOE madrileño
La dimisión de Lobato ocurre en vísperas del 41º Congreso Federal del PSOE, en el que el partido discutirá su estrategia y liderazgo. Mientras tanto, Ferraz ha empezado a perfilar a Óscar López, actual ministro de Transformación Digital y Función Pública, como el posible nuevo líder de los socialistas madrileños.
Declaración ante el Supremo
El horizonte judicial de Lobato no termina con su dimisión. Este viernes deberá declarar como testigo ante el Tribunal Supremo en la causa que investiga la supuesta filtración de los correos electrónicos en cuestión. Según fuentes judiciales, el juez buscará aclarar si hubo presiones desde Moncloa o el PSOE para difundir esta información.
Un adiós con críticas y reflexión
Juan Lobato cierra su etapa al frente del PSOE madrileño tras tres años marcados por intentos de reconstrucción de la unidad interna y de reposicionar al partido en la Comunidad de Madrid. "Ninguno somos imprescindibles", afirmó en su carta, comprometiéndose a seguir apoyando al partido como militante.
La renuncia de Lobato representa un momento crítico para el PSOE en Madrid, que ahora deberá buscar una nueva estrategia para afrontar los desafíos políticos y electorales en la región.